Laura Rodríguez-Carretero
Portavoz de UPyD en Almería
Las
obras que el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Almería ejecuta para hacer
el nuevo carril bici, o las de las calles Descanso y Haza de Acosta, tienen dos
características en común. La primera es que son obras electorales, terminadas
en las cercanías de los comicios, y la segunda, es que, en todos los casos, ha
existido improvisación y modificación de los proyectos iniciales.
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| Obras en Haza de Acosta |
Un
ejemplo es el nuevo acerado de la calle Haza de Acosta, donde el proyecto
inicial sólo contemplaba una acera (la de la izquierda, la deteriorada, la de
la derecha había sido reformada hace apenas un año). Sin embargo, el proyecto
se modifica y se cambian las dos aceras (izquierda y derecha), y esta operación
da como consecuencia que los imbornales y desagües se ciegan y quedan bajo las
ampliaciones, sin uso alguno.
Asimismo,
también se cambia el sentido de los aparcamientos, que pasan a estar a la
izquierda, lo que impide poner los contenedores en la calzada, por lo que se
ponen en la acera (coches a la izquierda, contenedores sobre la acera, a la
derecha). Al bloquear los contenedores el paso, se amplía en estos puntos la
acera, dejando unos escasos 60-80 centímetros para que pasen los peatones.
La
ampliación de la acera supone un obstáculo a la circulación, aumentando el
riesgo de accidentes, por lo que se ha procedido a demoler las ampliaciones y
no sabemos con qué proyecto se ha tirado el vallado de los aparcamientos de la Bola Azul , cambiando la
acera que se había realizado apenas hace 15 días para poner todos los contenedores
de la calle en este punto.
Eso
sin contar con que la ampliación ha dejado sin uso los pocos sumideros que
había en la calle, o que ya hay muchas losas sueltas, que las medidas de
seguridad en esta obra han sido nulas, o que en el tramo de la iglesia se
cambiaron las losetas dos veces en menos de una semana.
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