Javier Vallejo
Crítico de Teatro de El País
El dramaturgo almeriense Paco Bezerra ha estrenado en Madrid 'El señor Ye ama a los dragones', acogida con gran éxito tanto de público como de crítica. Reproducimos a continuación el artículo publicado en El País por el exigente crítico de teatro Javier Vallejo.
Entre
la calle de Dolores Barranco y la nave del Matadero donde se representa El
señor Ye ama los dragones, hay 750 metros en línea recta y dos océanos
culturales de por medio. En esa vía del madrileño distrito de Usera, casi todos
los comercios (tiendas de moda, peluquerías, supermercados, pastelerías) están
regentados por chinos, venden productos chinos y tienen una clientela
exclusivamente china: cruzarse en la acera con otro español produce la misma
extrañeza que produciría cruzárselo paseando por Zheijiang. Autóctonos y
orientales convivimos en la capital sin mezclarnos, como las corrientes de agua
caliente y fría en la mar océana. La obra de Paco Bezerra
recién estrenada habla de la distancia mental, afectiva e ideológica que media
entre los españoles y los inmigrantes extremoorientales, y de cómo la suavidad
y persistencia del carácter de estos acaba horadando la atalaya desde donde les
contemplamos.
El joven autor almeriense se ha inspirado en un cuento
chino breve de tradición oral (que no proverbio, como yerra el programa de
mano), transcrito en el siglo IV antes de Cristo por Shen Buhai, canciller del
reino Han, para trazar una fábula moral sobre el cambio radical que depara la
revelación de la verdad. Como en los cuentos filosóficos chinos y en su teatro
áureo, los protagonistas de esta pieza de Bezerra viven una experiencia que los
lleva de la ingenuidad al conocimiento, de la inconsciencia a una madurez
súbita y del poder a la sumisión (o viceversa).
La
puesta en escena de Luis
Luque tiene el toque justo de realismo mágico que caracteriza a los relatos
filosóficos chinos. A un prólogo luciferino (con una música de Luis Miguel Cobo
que puntúa a lo Bernard Herrmann el descenso de Magdalena al sótano lóbrego de
Wang y Xiaomei), le sigue un primer acto donde la escritura de Bezerra pega un
volantazo imprevisto hacia el sainete: Magdalena y Amparo, dos señoras decentes
con intenciones peores que las de las viejecitas de Arsénico y encaje antiguo,
nos revelan entre bromas (sin que se rebaje por ello el suspense antes creado)
el odio que anida en sus corazones y las maldades que eso les lleva a cometer.
Hacen daño para sentirse superiores.
El
señor Ye ama a los dragones
Autor:
Paco Bezerra. Intérpretes: Gloria Muñoz, Chen Lu, Huichi Chiu y Lola Casamayor.
Dirección: Luis Luque. Madrid. Matadero, hasta el 3 de mayo.