Javier
Zurro
Periodista
/ El Confidencial
La
chica de la curva; Ricky Martin encerrado en un armario en Sorpresa,
Sorpresa; el rey (Juan Carlos, no Felipe) en su moto ayudando a cambiar la
rueda a un conductor abandonado en la carretera… Leyendas urbanas de ayer y
hoy. A la gente le encanta escucharlas y contar que un amigo de un amigo de un
amigo asegura ver a Franco paseando con Marilyn Monroe por Torrelodones.
Cada
provincia y cada comunidad autónoma tienen sus propias historias, y sólo hay
que pasear por sus calles y pegar la oreja. Por si alguien no quiere viajar
también puede recurrir a las páginas de libros como Almería misteriosa (Editorial
Almuzara), de José Manuel Frías, un autor que ha dedicado una serie de
publicaciones a los sucesos insólitos y mitos de las ciudades andaluzas, y
que ahora se centra en las que tienen lugar en Almería.
El 'mojaquero' Walt Disney |
Un
sitio muy vinculado con el cine. Su mítico desierto fue el escenario
de decenas de películas del oeste, pero Almería también tiene un descendiente
bastardo que pocos conocen: Walt Disney. El mítico creador del ratón Mickey es
el protagonista de una de las leyendas urbanas más rocambolescas conocidas.
Esta tiene lugar en Mojácar, donde según las habladurías
nació Disney. Empecemos por un dato cierto: no existe ninguna partida
de nacimiento en Chicago, su supuesta ciudad de origen según su biografía
oficial, que confirme que Walter Elias Disney nació el 5 de diciembre de 1901
como todo el mundo cree.
Pista
número 2. En 1940 aparecen en Mojácar dos hombres con trajes oscuros asegurando
trabajar para el FBI y la
Disney. ¿Dos freakys o dos hombres del gobierno americano?
Según Frías, testigos contaron que estos desconocidos buscaron activamente en
los archivos parroquiales y municipales la partida de nacimiento de un niño
llamado José Guirao Zamora. No se sabe si lo encontraron, pero en el Archivo
Municipal de Mojácar falta el tomo de 1940, donde debería estar la solicitud de
los dos extraños que visitaron Almería. Ahora tocaba investigar quién era el
tal José Guirao.
En
1901 Isabel Zamora llega como empleada del hogar a casa de Ginés Carrillo,
médico de la localidad. Poco después la joven se queda embarazada sin que nadie
sepa la identidad del padre. Los rumores sobre una posible paternidad de
Carrillo, hombre respetado en Mojácar, comenzaron a extenderse, por lo que para
huir del escándalo se las apañaron para que un minero cediera su apellido al
niño, que pasó a llamarse José Guirao Zamora. Exacto. El mismo nombre que los
supuestos enviados de Disney buscaban.
La
historia no queda aquí. Huyendo de los rumores Isabel Zamora huye a EEUU con su
hijo, exactamente a Chicago. Allí su salud comienza a flaquear y decide
da a su hijo en adopción. Elige a sus vecinos. Un matrimonio económicamente
bien avenido. Sus nombres: Elías Disney y Flora Call. Los padres
declarados de Walt Disney.
A
esta rocambolesca historia se unen miles de leyendas, como aquella que dice que
Walt Disney le confesó a su amigo Dalí en una visita a nuestro país que deseaba
crear un parque de atracciones en el Cabo de Gata debido a sus orígenes.
Una
mezcla irresoluble de datos y rumores que intentó solucionar el que fuera
alcalde de Mojácar Carlos Cervantes, que en 2005 encargó al Servicio Central
de Identificación de la
Comisaría General de la Policía Científica
un estudio comparando a Disney con su supuesto Padre, el doctor Ginés Carrillo,
a través de imágenes de ambos. El resultado no fue concluyente y sólo si uno de
los descendientes del magnate se prestara a una prueba de ADN se podría
solucionar una de las curiosidades más divertidas de esa Almería misteriosa que
describe el autor.
Porque
no sólo tenemos el origen de Disney, también se habla de la verdad detrás del
baño de Fraga en Palomares, de fantasmas, de OVNIS y de exorcismos en Roquetas
de Mar. Lo que no ocurra en Andalucía no ocurre en ningún sitio.