Emilio
Ruiz
La
filmografía de Christopher Lee, fallecido a los 93 años, es inmensa. Más de 250
películas “que ni yo mismo he visto” adornan una carrera que comenzó como actor
en 1946. Como suele ser habitual, al principio, su carrera pasó inadvertida,
pero en 1957 sus papeles en La batalla del Río de la Plata y, un año más tarde,
en La maldición de Frankestein y Corridor of Blood le catapultaron a la
fama en el papel del Conde Drácula. En La momia hace una de sus mejores
interpretaciones.
Encasillado
en el papel de Drácula, en 1970 Billy Wilder le reclamó para interpretar a Mycroft
en La vida privada de Sherlock Holmes. En El hombre de la pistola de oro encarna
al asesino a sueldo de origen español Francisco Scaramanga, uno de los más
recordados rivales de 007. Más adelante dio vida al Conde de Rochefort en Los
tres mosqueteros (1973), de Richard Lester. En esta época, llegó a
trabajar con varias estrellas de Hollywood como Charlton Heston, Anthony Quinn y James Mason.
Christopher Lee |
En
1998 interpreta a Muhammad Ali Jinnah, fundador de Pakistán, en Jinnah.
En 2001 participa en la trilogía de El Señor de los Anillos, dirigida
por Peter Jackson y en las que interpreta el papel del mago Saruman. Cuando George Lucas inicia
el rodaje de su segunda trilogía de Star Wars, ofrece a Lee el papel
del Conde Dooku.
En
1994 recibió el Premio de la
Crítica de Londres por su contribución a la industria
filmográfica. En 2001 Lee fue nombrado caballero del Imperio Británico y
un año más tarde recibió en Viena el premio a la mejor carrera cinematográfica,
de manos de Mijail Gorbachov. En 2005, el periódico USA Today le
nombró el actor más taquillero y más visto en la historia del cine.
De
su actividad cinematográfica en España, Christopher Lee siempre tiene un
recuerdo para una anécdota. Se le requirió para hacer el papel de Marqués de
Sade. “Llegué al rodaje”, dice, “y en la habitación había un montón de gente,
toda vestida, y yo hacía de narrador, todo normal». Al cabo del tiempo un amigo
le dijo que había visto una película erótica suya. Sorprendido, acudió a verla
camuflado tras unas gafas de sol y un pañuelo. Descubrió que “en cuanto me fui
de España toda aquella gente se había quitado la ropa”.
Christopher
Lee también rodó en Almería. En Hannie Caulder, bautizada en España como Ana
Caulder (Burt Kennedy, 1971), interpretó a Bailey, un maestro de armas que
recibió a Raquel Welch y Rober Culp en su casa de la playa de Los Genoveses. Hannie
es una joven que busca la venganza después de que tres despiadados hombres, los
hermanos Clemens, la violaran. Hannie se toma la justicia por su mano y le
pide ayuda al cazarrecompensas Tom Price para que le enseñe a disparar. De la
película hay que destacar el papel de una Raquel Welch dura y sexy a la vez y la
sorprendente banda sonora de Ken Thorne.