Rafael M. Martos
Director de Noticias de Almería
Andan algunos revueltos por el guión de una serie que se rueda en Almería y que, cuentan, va de crímenes entre los invernaderos. Andan tan revueltos que algunos han llegado a pedir que no colaboren con la productora las instituciones provinciales, ya que la historia dejará a los pies de los caballos a nuestra provincia. Me resistía a entrar en el asunto hasta que personas a las que tengo en buena estima intelectual han cedido al asunto y han tomado partido por la censura, reprochando que se acceda a ser plató del propio escarnio.
Nya de la Rubia es Lola Requena |
Tirar de tijera ante lo que no nos gusta -se ajuste o no a la realidad- siempre es más sencillo que usarlo en nuestro propio beneficio o en combatirlo con inteligencia. Y es que cuando Chicote cuestiona la agricultura de Almería -insisto, se ajuste o no a la realidad- la respuesta es arremeter contra él y su equipo... en vez de -se me ocurre- hacer un congreso con los mejores cocineros de todo el Estado sobre nuestros productos, y si llegan los holandeses y emiten un reportaje -con verdades y mentiras- se reclama que no se deje entrar a periodistas extranjeros... en vez ser nuestras asociaciones agrarias quienes les traigan a conocer el sistema de producción...
Ya lo que faltaba es que se pidiera el guión a una productora para ver si la película o serie responde a lo que la autoridad competente considera oportuno. Vamos, que la ciudad de Martha's Vineyard, en Massachusetts, jamás debió dejar que se rodara allí Tiburón por si no iba nadie más su costa, o el alcalde de Nueva York debía prohibir el rodaje de películas en las que se viera violencia y droga por si no volvían los turistas, o los filmes en Nueva Orleans con el racismo como argumento principal... o sin ir más lejos, nunca debió hacerse El caso Almería... pero es que tampoco la Vivir es fácil con los ojos cerrados, que en esta es que salimos muy catetos...
Estas polémicas no favorecen en nada al trabajo que se está haciendo -intenso y
fructífero- desde distintas instituciones -especialmente la Diputación- por atraer
rodajes y abrirnos a una nueva época dorada cinematográfica.