Fernando
Plaza
Coportavoz
de La Asamblea
Ciudadana de Ahora Almería
Si
nos fijamos en los sueldos que se adjudicaron los propios concejales del
Ayuntamiento de Almería podríamos pensar que nuestra ciudad es un lugar donde,
como dice la expresión, “atamos los perros con longaniza”. Una ciudad donde el
paro es casi inexistente, donde no hay familias sin recursos ni demandas
sociales desatendidas como la mejora de la ayuda a domicilio a nuestros mayores o
más plazas de guardería para nuestros bebés, una ciudad donde la oferta
cultural es gratuita y llega a toda la población.
Luis Rogelio Rodríguez |
No
hay duda, si los sueldos de nuestro alcalde y concejales hacen que nuestra
corporación municipal sea la más cara de Andalucía será porque nuestra economía
es la más saneada y la situación de la ciudad y de quienes vivimos en ella es
la mejor de toda la comunidad autónoma. Ojala
que el acuerdo por unanimidad de todos los grupos municipales -PP, PSOE,
Ciudadanos e Izquierda Unida- para llegar casi al límite legal permitido en sus
sueldos, número de asesores y asignaciones a los grupos fuera el signo de la
bonanza de Almería. Un acuerdo que nos cuesta tres millones y medio de euros al
año (catorce millones en la legislatura).
Desgraciadamente,
en Almería vamos para cifras de récord en cuanto a degradación de las
condiciones de vida de la ciudadanía; donde la tasa de población en riesgo de
pobreza es de un 28,8% (la sexta mayor de España y la primera de Andalucía) y
en la EPA
correspondiente al 4º trimestre de 2014 Almería capital tenía una tasa de
desempleo que rondaba el 43%.
Lamentablemente,
los vergonzantes sueldos de Los 27 de Almería no están en consonancia con la
dura realidad de miles de almerienses sino más bien con la catadura moral de
unos políticos que, como primer acuerdo del Pleno, se aseguraron unos bolsillos
bien llenos obviando las necesidades más acuciantes de sus conciudadanos y
votantes.
Es
muy triste tener que dar la razón a quienes dicen eso de “todos los políticos
son iguales”, desde luego que en nuestro Ayuntamiento las únicas diferencias que
encuentro son en el uso o no de corbata y en que unos desfilan en procesiones y
otros en manifestaciones. Nada de esto sirve para mejorar la vida de la gente.
"Ninguno de Los 27 anunció en campaña que pretendían quedarse entre sueldos, asesores y dinero a fondo perdido a los grupos municipales con catorce millones de euros de las arcas municipales"
Todavía
no he oído a ninguno de Los 27 de Almería justificar públicamente la necesidad
de este malgasto de nuestro dinero, justificar la unanimidad del acuerdo.
Ninguno de Los 27 anunció en campaña que pretendían quedarse entre sueldos,
asesores y dinero a fondo perdido a los grupos municipales con catorce millones
de euros de las arcas municipales. ¿Cuántos almerienses les habrían votado
entonces? ¿Es la ciudadanía almeriense la que ha decidido que no necesita ese
dinero para cubrir necesidades urgentes? Es un pacto a espaldas de la gente de
Almería que avergüenza a las bases de sus partidos. Un pacto a escondidas en el
que ellos ganan, en el que nosotros perdemos.
¿En
qué deja el Pacto de Los 27 de Almería la vida política municipal? Este pacto
no sólo es económico, es un pacto de legislatura que deja sin oposición real el
ayuntamiento. A cambio de asegurar sus asignaciones y las de sus asesores y
grupos, la mayoría municipal (PSOE, Ciudadanos e Izquierda Unida) hará una
oposición de bajo perfil garantizando la tranquilidad del alcalde Popular. A
ninguno de Los 27 le interesa romper, demasiados intereses creados.
Visto
lo visto, yo no consideraría el Pacto de Los 27 de Almería un pacto entre
caballeros. Estoy seguro de muchos de los que están leyendo este artículo son
de mi opinión. Está en nuestra mano que rompan el acuerdo. Habrá que
recordarles para qué fueron elegidos y empiecen a trabajar por lo importante;
por la gente de Almería.