Antonio
Torres
Director
de Canal Sur en Almería
La
profesora del IES El Palmeral, de Vera, María del Carmen Morales Carmona (Vera,
1958), licenciada en Filología Hispánica por la Universidad de Granada, es
admirada y querida en su tierra. Coincide con las personas de sentido común y
con la escritora Elvira Lindo, que escribe: ”A la maestra se le respeta” por lo
que urge abrir una escuela de padres y madres para que aprendan a comportarse.
“La función ahora y el reto de los profesores es la de orientarles en cómo
distinguir la calidad de esa información que circula en la red. El profesor
debe formar a los chicos en la argumentación, eje vertebrado, motivador del
pensamiento creativo, que les dará autonomía e independencia”.
Mari Carmen Morales |
Vera
marca carácter por sus dos milenios de historia: cartaginense, romana y
musulmana. Es un nudo de comunicaciones y esa apertura al mundo se nota
en el carácter de la profesora. Se le define por la pasión a la enseñanza
que le viene marcado por los genes familiares. Sus inquietudes le llevan a
ser una máquina de gran potencia conversadora y “muy proactiva” y “aglutinadora”,
calificaciones de sus amigos de bachiller Diego Hermosilla, farmacéutico, y el
maestro de Turre Pedro Baraza Gómez, que
ejerce en Catalunya.
Los
sueños motivadores de la profe Morales se trasladan a los alumnos a los que
comprende cuando se sienten pasivos ante las imágenes actuales del éxodo
hacia Europa huyendo de la violencia y de la religión intransigente. Al
convivir en una sociedad tan hiperconectada, da la sensación de que estamos más
solos que nunca, pese al desafío tecnológico. “Es cierto que las nuevas tecnologías nos
permiten saber y estar en muchos
sitios. Corremos el peligro de actuar impunemente creyendo que no vamos a
sufrir las consecuencias. Olvidarnos lo más cercano. El desafío de las
redes trae la conveniencia de saber utilizarlo. Y solo será posible estando
bien formados”.
La
dignidad y la reputación con la que cuenta Mari Carmen le hace fácil llegar a
los alumnos. Sus amigos la admiran. José Antonio Lorenzo: “Respetada por sus
compañeros y querida por todos los que tenemos la suerte de habernos encontrado
con ella”. El doctor Antonio Rodríguez fue compañera de bachiller: “Me
atrevo a definirla: fidelidad, implicación y constancia en todo lo que
emprende”.
Mari
Carmen Morales tiene una hija y una hijo, ingenieros superiores de
telecomucaciones. Morales representa un patrimonio impagable por la defensa de
sus alumnos: ”Es el profesor quien puede enseñar al alumno a consumir la
información adecuada y a reconocer la que es perjudicial o falsa, enseñarle con
argumentos, eje vertebrador del pensamiento. El desafío para el profesor
es cómo recuperar la atención para poder hacer esto. Para conseguirlo no puede
hacer concesiones: el alumno tiene que saber que durante unos periodos de
tiempo debe concentrarse en lo que le están enseñando, aprender que hay
momentos en que el móvil e Internet son instrumentos de dispersión. En este
sentido, el reto central de la educación a día de hoy es recuperar la atención
del alumno. Si la figura del profesor no hubiera sido tan maltratada, ninguneada
y denostada otro gallo nos cantaría. El verdadero educador es el que enseña
para que el alumno se independice, y él mismo esté ya preparado para pensar y
seleccionar toda la información que le llegue”.
Morales
tiene algo especial. Es de las que se exige a sí misma lo mejor,
atendiendo a los abuelos o a los más mocosos de la clase. Participa de forma
altruista en obras de teatro o recitales. Una persona ejemplar que representa a
esos profesores que en silencio trabajan por los demás.