Juan
Torrijos
Periodista
No
deja de resultar sorprendente que a Luis Rogelio se le exija desde Sevilla que
deje el cargo de alcalde si quiere repetir en el Senado y no se haga lo mismo
con Eugenio Gonzálvez, alcalde de Gádor, ni con el presidente de la Diputación y alcalde de
Roquetas, Gabriel Amat.
Podría alegar el señor Moreno que no se puede aplicar
la misma relación entre el cargo de alcalde y presidente de la Diputación.
Vale. Pero en el caso de Eugenio y Gádor, ¿a qué argumento se nos agarrará el
jefe andaluz del PP?
Luis Rogelio ha tenido que dejar la alcaldía y Eugenio no |
Nos puede contar que no es lo mismo ser alcalde de una
ciudad de casi doscientos mil habitantes que de un pueblo de unos pocos miles.
Y es cierto, pero para el caso que nos ocupa debería ser lo mismo. Si los
vecinos de Almería necesitan a su alcalde las veinticuatro horas del día, no
entiendo que los de Gádor no se merezcan un alcalde en las mismas
circunstancias. Parece ser que no. Los de la capital deben ser de primera, los
de Gádor…¡ay, los de Gádor!
Una cosa tendríamos que tener en cuenta los
ciudadanos: el sueldo que gana un senador de España no lo puede pagar un Ayuntamiento, y menos si este tiene un par de miles de habitantes (arriba o
abajo). Tampoco puede ofrecer dietas como las que cobran los senadores, viajes
gratis por todo el país, piscina, paseos por el retiro y papas fritas con huevo
en Lucio. Me gustan más, lo digo en serio, las del Quinto Toro de nuestra
Almería. Hay una gran diferencia entre ellas.
"Se comprende que Eugenio quiera seguir en el Senado y no perder sueldo y demás alegrías para el cuerpo serrano que acompaña al político gadorense"
Se comprende que Eugenio quiera
seguir en el Senado y no perder sueldo y demás alegrías para el cuerpo serrano
que acompaña al político gadorense. Si Juanma Moreno lo echa del Senado le hace
una putada tremenda, y si lo echa del Ayuntamiento Eugenio pierde la legalidad
política que en el futuro lo lleve a intentar la presidencia de la Diputación Provincial.
¿Y en el PSOE? Vamos a ver lo que ocurre en la vecina localidad de Gádor, en
Benahadux, donde dicen que el alcalde se marcha de la alcaldía al ir en la
candidatura al Congreso, pero hasta ahora don Juan no ha dicho oficialmente
esta boca es mía. ¿Está esperando a ver lo que hace el partido con su compañero
Juan Carlos Pérez Navas en la capital? No entiendo que el PSOE permita que Juan
Carlos tenga dos cargos, portavoz en el Ayuntamiento de Almería y senador.
Teruel no debe ser partidario de repartir el trabajo.