Marta Rodríguez
Periodista
Paloma
pasea cada día con su bici por la Plaza de España de Ciudad Jardín, en Almería,
donde vive con parte de su numerosa familia (son trece hermanos). Estudia
Educación Social en el campus de La Cañada. Le gusta el mar, estar con los
amigos y tiene una novela publicada, Me muero por saberlo. Podría
parecer una joven más, sin embargo, a una edad en la que muchas chicas se
plantean su futuro académico, profesional o sentimental, ella va a poner a
prueba su vocación religiosa.
Paloma, la segunda por la derecha, quiere ser monja |
Paloma
Cueto (Almería, 1994) ha sentido la llamada de Dios y ha dado el paso de
contarlo en televisión. Es una de las cinco participantes en el docureality
Quiero ser monja que Cuatro estrena este domingo 10 de abril a las 21.30
horas. Durante seis semanas, las jóvenes se integrarán en el día a día de tres
congregaciones religiosas de Madrid, Alicante y Granada, donde vivirán momentos
de recogimiento, oración y trabajo con los más desfavorecidos.
Tal
y como se explica en la web de Cuatro, alejadas de su entorno, sin móviles ni
objetos superfluos, las concursantes, muy diferentes entre sí, pero unidas por
un fuerte sentimiento espiritual, comprobarán si están preparadas para
integrarse en la vida religiosa o, por el contrario, desean vivir su fe como
seglares.
En
la entrega de este domingo, los espectadores de Quiero ser monja (adaptación
del formato The Sisterhood: becoming nuns que Mediaset produce con Warner
Bros ITVP España) conocerán el entorno de las chicas. En el caso de Paloma,
viajarán hasta Almería y descubrirán el día a día de la joven: sus paseos en
bici, sus rincones favoritos y sus encuentros familiares. La familia Cueto está
vinculada a la Iglesia a través del Camino Neocatecumenal.