Juan Folío
@opinionalmeria
Tensión distendida, pero tensión al fin y al cabo, en la barriada sorbeña de Los Castaños por la presencia de las máquinas de la delegación del Ministerio de Fomento para proceder a la demolición de la casilla de peones camineros. Un grupo de vecinos procedentes de la propia barriada, pero también de los anejos vecinos de Cariatiz, La Mela y La Huelga, han impedido que las pesadas máquinas puedan culminar su labor. En ningún momento ha habido enfrentamiento físico o palabras mayores y los responsables del Ministerio se han limitado a retirarse del lugar.
La máquina no llevaba "buenas intenciones" |
Concentración de coches oficiales... y particulares |
Entre los vecinos la decepción por lo ocurrido es enorme. Creen que los responsables del Ministerio han actuado con astucia al hacer creer que el derribo de la casa no se iba a llevar a cabo. Un despiste de los vecinos y se hubieran encontrado la casa en el suelo.
El malestar por la actuación del alcalde de Sorbas también se ha puesto de manifiesto. Según los vecinos concentrados, el alcalde les había dado a entender que todo estaba ya arreglado y que la vivienda pasaría a titularidad municipal para dedicarla a actividades sociales de la barriada. "El alcalde se ha escondido y ha preferido no dar la cara", han manifestado algunos vecinos.