Voy por la acera, me encuentro un macetero, bajo a la calzada y... ¡plaf!

Nuria Torrente
@opinionalmeria

Se cuenta en la capital de la provincia que su Ayuntamiento tiene cierta querencia a los pleitos. No hay controversia que desee arreglar de buenas, sino que todo lo confía a la decisión de la justicia. Después le pasa lo que le pasa, que lo que cuesta cinco tiene que pagar diez, pero, mientras tanto,  ¿y la gran labor social que se ha hecho dándole trabajo a los abogados?

Los maceteros de la discordia

La penúltima equivocada decisión municipal lleva camino de convertirse en otra cadena de pleitos, pues no es otra cosa que una invitación a los viandantes a ser víctimas de un accidente por negligencia municipal. Resulta que, según ha denunciado el Grupo Municipal Socialista, el concejal responsable de servicios urbanos, o quien sea, no ha tenido mejor ocurrencia que colocar dos inmensos maceteros en las inmediaciones de la Plaza de la Catedral. Los maceteros ocupan justamente el ancho de la acera. ¿Y los que transitan por la acera, qué hacen, dar un salto? No, es demasiado arriesgado. Lo normal es que abandonen el espacio peatonal para introducirse en el espacio reservado a vehículos, pero si en ese momento viene un coche, pues... ¡plaf! Y pleito al canto.

Dicen los socialistas que es que no se tiene sensibilidad con las personas con movilidad reducida o con las familias con carritos de bebé. Sensibilidad no se ha tenido ni con esas personas ni con nadie. Es tan disparatada la decisión que ¿qué se apuestan a que el lunes ya no están ahí los maceteros?