Rafa Góngora
Periodista
La Reina de España, de Almería y de Roquetas de Mar ya está casa. Carmen Martín, la jugadora almeriense de la Selección Española de balonmano que ha participado en los Juegos de Río 2016, ya respira aire de su tierra, aire de su Roquetas de Mar. El avión procedente de Madrod pisó suelo almeriense a las 17:15 horas y Carmen Martín apareció por la terminal de salida del aeropuerto de Almería unos 20 minutos después. La cara le iba cambiando conforme se acercaba a sus padres para abrazarse a ellos con toda la fuerza del mundo, con esa misma fuerza que tantos goles ha hecho con las ‘Guerreras’ en los Juegos Olímpicos.
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| El jueves Carmen vuelve a Rumanía para incorporarse a su club |
La roquetera llegó a casa cansada, pero muy feliz. Apareció con la equipación de la Selección Española y con su diploma olímpico en la mochila azul de España, una mochila cargada de buenos recuerdos porque la experiencia en Río 2016 ha sido inolvidable. “El balance no es tan positivo como nos hubiera gustado, pero hay que quedarse con lo bueno porque tenemos cuatro años de trabajo por delante para los siguiente Juegos Olímpicos”, fue la primera reflexión que hizo la roquetera antes de salir del aeropuerto rumbo a casa.
Carmen Martín no olvidará Río 2016 porque han sido sus segundos Juegos Olímpicos: “Han sido mis segundos Juegos y la verdad es que estoy muy contenta; Río 2016 ha sido para muchas de mis compañeras su primera partipación en unos Juegos. Ha sido una gran atracción estar en Río de Janeiro”, recuerda la fenómena roquetera. Ha sido una experiencia que jamás olvidará porque “lo hemos pasado muy bien, hemos intentado disfrutar tanto dentro de la pista como fuera; el grupo de la Selección Española es una maravilla. Me llevo muy bien con todas las chicas que formamos el combinado nacional”, comenta.
Carmen Martín estará poco más de 24 horas en su Roquetas de Mar porque este jueves regresa a Bucarest para comenzar la pretemporada con el equipo rumano, el último en ganar la Champions League: “Aprovecharé al máximo este poco tiempo que estaré en Roquetas de Mar; disfrutaré al máximo con mis padres, mis hermanos, mis sobrinos, mi gente...”, dice la roquetera.
Seguirá en Rumanía porque “tengo mucha ilusión y buscaremos hacer una buena temporada”, anuncia una Carmen Martín que asegura que “no he tocado aún techo en el balonmano y seguiré disfrutando del balonmano porque me encanta”. Le gustaría regresar a España, pero “lo veo difícil”.
Sería muy bonito que el Pabellón Infanta Cristina pasara a llamarse Carmen Martín: “He pasado media vida ahí”, dice emocionada. Nos dejó muchas imágenes en Río, pero las mejores fueron ayer en el aeropuerto de Almería con sus padres Paco y María.