Miguel Ángel Castellón: “O María Muñiz de Gerente o nadie”

Juan Torrijos
Periodista

Eso es hablar claro, no me digan. Al señor Castellón se le entiende todo. Aquí de lo que se trata es de darle un sueldo a una compañera de partido a la que fastidió echándola de la lista municipal de la capital Luis Rogelio Rodríguez-Comendador Pérez. O María de Gerente en Urbanismo o no hay Gerente. Bastante dictatorial la decisión, ¿no les parece a ustedes? Algo parecido a: “O yo o el caos”. A veces es preferible ese caos.

María Muñiz

Yo propongo que el Ayuntamiento se ahorre los casi diez mil euros mensuales o más que nos cuesta el cargo a ocupar por doña María. Lo que viene a decirnos la mano derecha del señor alcalde es que a la Gerencia de Urbanismo no le hace falta un Gerente si este cargo no recae en la persona de la señora Muñiz. Que el sueldo es para ella o no es para nadie. Pues nada, para nadie, ahorro para el ciudadano. Es de suponer que la oposición estará por la labor de dejar el cargo sin ocupar. Son muchas las necesidades que tiene la ciudad y los más de cien mil al año no es mala inversión en barrios tan necesitados como tiene la ciudad.

Me cuesta trabajo creer que el señor Castellón, que tonto no es, haya salido con esa lapidaria frase sobre la Gerencia de Urbanismo y doña María. Entenderá el señor concejal que a partir de ahora se le va a recordar por la mencionada, y no le deja ni a él ni a su grupo en el Ayuntamiento en las mejores condiciones. Si rectificar es de sabios, que dice el viejo proverbio, a ver si por lo menos tenemos uno en la Plaza Vieja. 

Con su frase le pone muy difícil a su partido el que María llegue a la Gerencia, y si al Urbanismo lo deja sin Gerente se gana lo de dictador con todo merecimiento. Negocie con Miguel, el hombre de las alturas, el nombre del próximo Gerente. Y si le convence para que sea María que se vea el voto de C’s claro y nítido. Cualquier otra circunstancia no le va a dejar a usted en airosa situación política.

La historia de María Muñiz con la Gerencia de Urbanismo empezó mal y mal camino lleva. Hubo rara convocatoria, extrañas votaciones desde algún grupo de la oposición, recuerden los cambios de IU y ahora llega la dictadura desde el equipo de gobierno popular: “O María o nadie”, con un par del señor Castellón, y encima sin tener mayoría en el Ayuntamiento. Los empecinamientos en política no son buenos, se vuelven en contra.