Antonio Pardo
Vecino de Albox
Es la pregunta que se hace Mar Verdejo Coto en un artículo de opinión titulado “¡Aquí no se juega!”, publicado el día 15 de octubre. La respuesta debe ser “Prohibido opinar” de un asunto cuando se ignora la verdadera razón de la prohibición, en este caso, de jugar al fútbol en la plaza de San Francisco de Albox. Sí, claro que sí, prohibido jugar al fútbol con balón de reglamento, o sea, de cuero, a jóvenes de 12, 14 y más años y, a veces, acompañados de algunos adultos.
Un partido de fútbol en la calle |
Pero el alcalde no ha prohibido jugar con pelotas de goma a niños pequeños, ni que jueguen al pilla pilla (aquí decimos al pillaíco); tampoco ha prohibido que jueguen a la comba o a las canicas, o que monten en triciclo o patines..., pero sí ha prohibido a los jovenzuelos jugar al fútbol con balón de cuero, porque los pelotazos pueden hacerle daño a otras personas, o impiden que nadie pueda pasear o sentarse en los bancos de la plaza; y no a que los futbolistas destrocen con balonazos las farolas, árboles y jardines, y rompan los azulejos de travertino de los parterres que circundan la plaza.
No a que tengan la puerta de entrada de la iglesia de portería, con goles que entran incluso en el templo; no a que los balones lleguen hasta el parque infantil anexo a la plaza, donde los niños más pequeños tienen su espacio para jugar; no a que rompan el letrero luminoso de un comercio o los cristales de las viviendas. No, y otra vez no, a la falta de respeto y a las respuestas soeces que algún zángano da cuando un vecino le regaña y le ruega que jueguen en otros lugares adecuados para la práctica del fútbol. Pues en Albox hay dos pabellones de deportes, un gran campo de fútbol, un polideportivo, dos colegios y dos institutos cada uno con varias pistas deportivas...
Según fuentes municipales existe una ordenanza con la prohibición de jugar al fútbol en plazas y calles, “que sólo afecta a chicos a partir de ciertas edades (no a niños pequeños)”. El alcalde, en mi opinión, debería haber publicado un bando recordando la prohibición de la ordenanza (y no ponerlo en su cuenta de Facebook y menos hacerle una foto al balón 'arrestado', lo que ha originado un sinfín de opiniones, unas a favor y otras en contra, y un tema mediático desorbitado). Y después, que la Policía Local actuara invitando a los jóvenes a desistir de jugar al fútbol y, en su caso, 'arrestar' balones y/o, como última medida, sancionar a los padres de los jóvenes infractores reincidentes (que rascarse el bolsillo da muy buenos resultados).
Por otra parte, la Asociación de Vecinos de La Loma, en repetidas ocasiones, tanto verbalmente como por escrito, ha trasladado las quejas de los vecinos al Ayuntamiento. De hecho, a raíz de estas quejas, el Consistorio puso un cartel en la plaza prohibiendo el fútbol.
Y no a los medios de comunicación que han magnificado este 'caso' como si se tratase de un gravísimo crimen. En Albox han existido otros acontecimientos mucho más importantes que este, y no ha venido tanta tele, ni han sido publicados en los medios de comunicación, o no han tenido la debida repercusión, como ha sido en este caso la prohibición del fútbol en la plaza de San Francisco.