‘El Correo de Andalucía' prescinde de los fotoperiodistas

Tania Artajo
@opinionalmeria

Nuevo lío en El Correo de Andalucía. El histórico periódico no sale de una cuando ya se ha metido en otra. Ahora, la denuncia viene de la Asociación de la Prensa de Sevilla. La empresa propietaria del diario, el grupo Morera&Vallejo, ha decidido de prácticamente prescindir de los fotoperiodistas profesionales. El periódico no tiene fotógrafos en su plantilla y ha recortado drásticamente los contratos de los tres fotoperiodistas que trabajan como “falsos autónomos”, porque realmente ocupan puestos estructurales, de tal manera que ha reducido a la mínima expresión su relación laboral y su trabajo cotidiano.

El Correo de Andalucía quiere que las fotos las hagas los periodista

Según la asociación de los periodistas sevillanos, las fotografías de los fotoperiodistas del periódico están siendo sustituidas por las de archivo, por las que envían los gabinetes de comunicación o particulares, o por las que capturan de las redes sociales. En los nuevos contratos, además de abaratar sin ningún tipo de negociación las tarifas de las fotografías, la empresa les ha quitado el fijo que tenían asignado y ha supeditado todos sus ingresos al volumen de su trabajo, al llamado “cobro por reportaje”.

Inicialmente, el compromiso era que no sufrirían merma alguna. Sin embargo, desde hace dos semanas, han pasado de una media de ocho fotografías diarias a poco más de tres entre los tres y, además, de forma discriminatoria entre ellos.

Paralelamente, y siempre según la APS, la empresa ha deslizado la posibilidad de que los redactores asuman la doble tarea de periodistas y fotógrafos. Los trabajadores de la plantilla de El Correo de Andalucía han mostrado su total apoyo a los tres fotoperiodistas y han rechazado asumir el trabajo de éstos.

La Asociación de la Prensa de Sevilla considera que estamos ante un nuevo atropello laboral y ante un nuevo desprecio de la calidad del periodismo. “Es intolerable que el trabajo de un fotoperiodista sea sustituido por un material elaborado por personas no profesionales o ajenas al periodismo. Como lo es también la posibilidad de que los periodistas se vean obligados a realizar la labor de los fotoperiodistas”.