Cristina La Veneno, el personaje nacional más buscado en Google por los españoles en 2016

Aashta Martínez
Periodista / Dos Manzanas

Fallecida hace poco más de un mes, ha sido la personalidad patria más buscada en Google por los españoles en 2016, según informó esta misma semana el gigante tecnológico, que analiza cada año por estas fechas cuáles fueron las búsquedas más populares de los internautas. En el ránking local de consultas en el buscador, liderado por los Juegos Olímpicos de Río, La Veneno solo se vio superada por otras dos personalidades internacionales: Donald Trump, presidente electo de los Estados Unidos, y David Bowie, fallecido también este mismo año.

Cristina La Veneno

La conversión de Cristina Ortiz en fenómeno viral gracias a su presencia en la plataforma YouTube y las redes sociales, la reciente publicación de su libro de memorias ¡Digo! Ni puta ni santa: las memorias de La Veneno, así como su trágico fallecimiento, no exento de polémica, fueron las principales razones por las que La Veneno se habría convertido en el personaje español más googleado del año.

A nivel mundial, el término más buscado en Google fue Pokémon Go, el videojuego para iOS y Android que se convirtió en todo un fenómeno social y cultural a principios de verano. Le siguen de cerca el iPhone 7, nuevo modelo de teléfono inteligente de Apple, y el polémico Donald Trump, elegido presidente de Estados Unidos a principios de noviembre.

Mientras tanto, el cuerpo de Cristina La Veneno sigue en la morgue del Tanatorio Norte de Madrid más de un mes después de su fallecimiento. Su familia, que sigue negando el carácter accidental del traumatismo craneal que la condujo a la muerte, insiste en la necesidad de una nueva autopsia que confirme sus sospechas.

Mari Pepa, hermana mayor de La Veneno, ha comentado además en declaraciones al portal Vanitatis que su familia no se sintió bien tratada por parte de las autoridades y del personal del Hospital Universitario La Paz. “Mi hermana estaba a las 12 y pico de la noche en el hospital y no es de recibo que nos llamasen a Adra a las cinco y media (…)¿A quién estaba encubriendo el hospital La Paz? No creo que fuera al novio de mi hermana. Ahí tiene que haber algo más (…) Me dijeron que tenía piojos y que por eso la habían tenido que rapar para operarla. Como si por eso fuese una persona de segunda. Hemos vivido situaciones de transfobia. Se han burlado de nosotros, nos han tratado como a paletos y han conseguido dividir a la familia. Ha habido irregularidades y creo que nos han escondido cosas”, aseguró.

Tampoco está claro si la familia tiene la intención de incinerar finalmente el cuerpo de Cristina y esparcir sus cenizas en el Parque del Oeste, como ella había comentado en vida a varios conocidos, u optarán por enterrarla en Adra, su localidad de origen.

Lejos de guardar luto, Alín, de 24 años, ha optado por rentabilizar la relación que mantenía con la artista. Además de vender a fans y conocidos objetos personales de Cristina, también ha comenzado a realizar bolos por distintos bares de España. El viernes 2 de diciembre, por ejemplo, el joven fue contratado para actuar en un local de León. Además de pagarle el viaje en tren y una noche de hotel, Alín iba a recibir 300 euros por charlar sobre Cristina y hacerse fotos con los asistentes. A cambio, subastaría algunos de los pocos objetos de la vedette que aún quedaban en sus manos. El bolo fue cancelado a última hora.

Juan López, promotor del evento, conocía a Cristina y trabajó en varias ocasiones con ella. El pasado 25 de noviembre, sin ir más lejos, estaba previsto que la artista actuase en su local. “Lo cerré personalmente con Cristina, como siempre hice. Y le dije ‘el dinero te lo doy a ti y no le digas nada a Alin, porque si no, no verás un euro’. Se lo hubiera quitado él, como todo”, señala. Sin embargo, el destino impidió que eso ocurriese y, en su lugar, decidió contratar a su pareja. “Si la vida es un negocio, pues habrá que dejar penas a un lado y tendré que dedicarme al negocio”, asegura López, defendiéndose de aquellos que le acusan de oportunista.

De momento, y tras dos intentos fallidos, el evento sigue sin poder celebrarse. “Espero que sea pronto. Queremos que sea el mismo día del funeral, porque una vez se la incinere ya no se hablará de ella, y esto se acaba”, concluye López.