Juan Folío
@opinionalmeria
El hombre es el animal que suele tropezar dos veces en la misma piedra, suele decirse. Y es verdad. Han sido varios los alcaldes de Almería que han sido inhabilitados por la justicia –el último, el de Albox, pero antes alcaldes de Antas, Turre…- por no facilitar a la oposición la información a la que tienen derecho. Ahora, el que ha caído es el de Carboneras, Salvador Hernández, perteneciente a un partido local, el Gicar, que gobierna en coalición con el Partido Popular.
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| Hernández y Amérigo |
El Juzgado de lo Penal 1 de Almería ha condenado a Hernández a tres años de inhabilitación especial para empleo o cargo público al considerar probado que no entregó "la documentación solicitada en innumerables peticiones, por lo menos, hasta 26" al portavoz del Grupo Socialista, José Luis Amérigo. Según el juez Luis Columna, la actitud pasiva del alcalde entorpeció la transparencia de la gestión pública del Ayuntamiento que preside, por lo que resulta evidente que ha cometido un delito de atentado contra los derechos cívicos.
El fallo recoge como hechos probados que Hernández impidió de forma deliberada y constante la labor de oposición de Amérigo al menos desde el 5 de septiembre de 2011 hasta el 10 de junio de 2014. Las peticiones de información versaban sobre diversos expedientes de contratación y adjudicación de servicios municipales, además de las actas municipales. En todos los casos, la respuesta al concejal era que "se le concede el acceso a la consulta solicitada y tan pronto como sea posible nos pondremos nuevamente en contacto con usted para comunicarle día y hora en la que el personal responsable, según la disponibilidad del servicio y sin entorpecimiento del mismo, podrá atenderle para la consulta solicitada". Para el magistrado, esto "no llegó a producirse en ninguno de los casos".