La prepotencia del PP de Adra

Francisco Fernández Guardia
Portavoz de Plataforma Abderitana

Ante el lamentable y bochornoso espectáculo exhibido por la bancada del PP en el último Pleno del Ayuntamiento de Adra, desde Plataforma Ciudadana Abderitana, pasado el primer calentón, creemos oportuno hacer algunas consideraciones y plantear también varias propuestas para impedir que el gobierno del PP abderitano siga actuando con la prepotencia que acostumbra, a pesar de estar en minoría desde las últimas elecciones municipales, hace ya dos años.

El pleno en cuestión

En primer lugar hay que destacar, aparte de deplorar, la resistencia y el rechazo del Alcalde y concejales del PP a comparecer ante el Pleno del Ayuntamiento para dar cuenta de su gestión y responder a las preguntas de la oposición, una de cuyas primordiales funciones legalmente establecidas es precisamente fiscalizar y controlar la acción del gobierno municipal.

Si estuvieran convencidos de sus logros no habrían puesto trabas a la comparecencia de algunos de sus concejales

Todo parece indicar que el PP no debe estar muy satisfecho de su gestión, a pesar de su reiterada labor propagandística para hacernos creer todo lo contrario. Si realmente estuvieran convencidos de sus logros y su buen hacer no habrían puesto todo tipo de trabas y cortapisas a la comparecencia de algunos de sus concejales; al revés, habrían pedido ellos mismos comparecer ante los representantes de la ciudadanía para poder explayarse sobre sus áreas de responsabilidad y despejar cualquier duda planteada por la oposición.

En segundo lugar debemos denunciar enérgicamente la falta de respeto y la mala educación que se evidenció en la citada sesión plenaria por parte de quienes tienen a su cargo el gobierno de nuestro pueblo. El comportamiento de los “populares” con sus risotadas, comentarios altisonantes y actitudes chulescas produce vergüenza ajena y resulta totalmente impropio de quienes deben dar ejemplo de saber estar, máxime cuando se trata de una actuación institucional requerida en función de su cargo, por el que cobran un buen sueldo que les paga la ciudadanía.

A todo ello se añade la prepotencia y el abuso de autoridad del alcalde y Concejal de Urbanismo que, parapetándose en un innecesario informe del Secretario, impuso un procedimiento de comparecencias totalmente ajeno y contrario a lo que se debe hacer en estos casos, que no es otra cosa que explicar la gestión municipal concreta de las áreas correspondientes y responder a todas y cada una de las preguntas que formule la oposición sin filtros, restricciones o censura previa.  Nada más lejos de lo sucedido. Primero exigieron al grupo que propuso las comparecencias que concretasen de antemano las cuestiones que iban a plantear, cosa tan inusual como absurda, ya que las preguntas concretas se deben formular después de escuchar las explicaciones de los comparecientes sobre sus áreas de responsabilidad.

Pero no quedó ahí la cosa. El procedimiento impuesto impidió además a nuestro portavoz, en una muestra de abuso de autoridad sin precedentes, plantear a los comparecientes las cuestiones que considerase oportunas, todas ellas relacionadas por supuesto con las funciones que desempeñan (y reiteramos, por las que cobran) los concejales comparecientes.

El esperpento llegó a tal extremo que quienes tienen a su cargo áreas como la limpieza y el mantenimiento de la ciudad, el medio ambiente, parques y jardines, la agricultura, el turismo o el personal del Ayuntamiento, entre otras, se mostraron incómodos e incapaces de responder a lo que no les habían preparado de antemano, aunque se les preguntara por algo tan elemental como el organigrama y el personal a su cargo, o qué procedimiento y criterios se aplican para distribuir tareas y responsabilidades en sus respectivas áreas.

La única conclusión que cabe extraer de tan bochornoso espectáculo es que al PP le resulta especialmente molesta cualquier forma de rendición de cuentas que no sea hacer un uso propagandístico y partidista de los medios y redes municipales. Ocultar o maquillar su alto grado de  incompetencia es su “modus operandi” favorito. Y eso pasa por torpedear al máximo la legítima e imprescindible labor de la oposición; lo que viene a ser lo mismo que atentar contra la propia esencia de la democracia representativa, que tanto dicen defender.

Frente a esa forma de funcionar, basada en el ordeno y mando, que va mucho más allá de un Pleno tan poco edificante como el pasado, desde Plataforma vamos a plantear un conjunto de iniciativas que obliguen a un gobierno en minoría, como el del PP de Adra, a respetar unas mínimas normas de transparencia, rendición de cuentas y respeto por los derechos de los grupos de la oposición, que representan a la mayoría de los vecinos y vecinas de Adra. Entre esas iniciativas están las siguientes:

Petición de plenos monográficos sobre el estado del municipio para que cada año el equipo de gobierno rinda cuentas de su gestión globalmente y se someta al control de la oposición.
Elaboración de un nuevo Reglamento Orgánico Municipal que asegure un funcionamiento totalmente transparente y democrático del Ayuntamiento, incluyendo garantías para una efectiva participación ciudadana en la gestión municipal.
Creación de la Comisión especial de Vigilancia de la Contratación, como existe en multitud de ayuntamientos, para velar por la transparencia de todas las contrataciones y el seguimiento estricto de los contratos que suscriba el ayuntamiento.

No vamos a consentir ni un día más que el gobierno del PP haga y deshaga a su antojo, máxime cuando están en minoría y bastaría con una acción sistemática y coordinada de los grupos de la oposición para forzarles a funcionar con la transparencia y respeto por las normas  democráticas a las que están obligados, aunque se las salten a la torera en demasiadas ocasiones.