Baltasar Haro Collado
Levante Televisión
Mientras la Junta de Andalucía nos cobra a los usuarios un capazo de millones por el Canon de Depuración, las aguas no se depuran, o se hace mal, y siguen llegando al pantano o al mar sin un tratamiento integral. La depuradora de Huércal-Overa, dañada en septiembre de 2012, lleva seis años vertiendo el agua, mal depurada, por la rambla Guzmaina. Ahora está en construcción la nueva y se anuncia que estará a pleno funcionamiento para el verano de 2019. Mientras, “el riachuelo artificial maloliente” sigue discurriendo por la rambla con destino al pantano de Cuevas del Almanzora dejando un rastro de lodo oscuro y verde.
La depuradora de Huércal-Overa sigue en construcción |
Por fin, después de años de olvido, la Junta anuncia la construcción de nuevas depuradoras en Antas y Cuevas del Almanzora. Los ecologistas se quejan del abandono de las instalaciones de las depuradoras de Cuevas del Almazora que vierten a la desembocadura del río. Las aguas allí estancadas, no deben ser muy buenas para la salud pública y, además, han sido motivo de denuncias de varias asociaciones vecinales costeras. A ver si, después de tantos años de abandono, este anuncio se convierte en una realidad y podemos anunciarlo a través de los medios.
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