Juan Torrijos
Periodista
Diputación nos anunció hace meses la inversión
de treinta millones en las necesidades hídricas que tiene Almería. No le voy a
negar que sea cierta la inversión, ni reprochar que se haya realizado. Pero no
deja de ser notorio que una de las empresas de la institución y en la que se
han invertido ocho millones, según anuncian, esté en la picota social y
política. Nos referimos a Galasa.
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| Oficinas de Galasa en Vera (LOa) |
No es la primera vez que sobre ella
escribimos, y nos da la impresión que no va a ser la última. Pueblos del Levante se han levantado contra
la empresa de aguas de la Diputación. Cierto que son pueblos gobernados por el Partido Socialista
y que tras ese levantamiento puede haber trasfondo político, pero ello no debe
ocultar el que Galasa no ha sido capaz de responder a las necesidades de la
zona a la que sirve.
La historia de una derrota, como así hay que entender la gestión de la Diputación en Galasa, debería tener una explicación más allá de vender una inversión de ocho millones de euros que encima no han resuelto el conflicto
La historia de una derrota, como así hay que entender la
gestión de la Diputación en Galasa, debería tener una explicación más allá de
vender una inversión de ocho millones de euros que encima no han resuelto el
conflicto entre las corporaciones socialistas y populares, así como con los
vecinos por el agua que les llega a los grifos y el precio que pagan por ella.
La pelea que sostuvieron en su momento los dos partidos (PP-PSOE) por unos
nuevos estatutos de la empresa y los precios, acabó con un desmembramiento de
la misma y con pueblos que se han salido de Galasa buscando otras alternativas.
¿Para qué han servido los ocho millones de
euros invertidos? Preguntaría ¿En qué se han gastado esos ocho millones en
Galasa, pues parecen muchos millones? El resto de la inversión, los veintidós
dedicados a los municipios, se pueden entender, los ocho de Galasa, no han
sabido ser productivos. Que nos lo cuente don Javier Aureliano. Con la nueva
mayoría en la casa grande, con Vera y Codeur en sus manos, algo menos
levantiscos deben estar los socialistas del Levante almeriense ¿o siguen en sus
trece y no van a apoyar una salida a la que fuera la empresa-corona de la Diputación?
Estamos ante una nueva andadura política y debería ser un buen
momento para que entre todos se le buscara una salida a una empresa en la que
los almerienses de la provincia han invertido hasta el momento mucho capital.
Lo menos que habría que pedirle a los nuevos tiempos y políticos son nuevas
soluciones para Galasa. ¿Llegarán?
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