Antonio Torres
Director de Canal
Sur en Almería
⏩Los periodistas
tenemos gran responsabilidad ante el juicio más importante y mediático de toda
la historia de la Audiencia Provincial de Almería. Medios escritos y todas las
cadenas de televisión españolas y una inglesa ya tienen a sus enviados especiales
preparados. Casi 150 periodistas y, como en el juicio del
Caso Almería, el hotel cercano, Gran Hotel Almería, es el más beneficiado para
los colegas que se han desplazado desde fuera. Hubo críticas en la vista oral a
la falta de respeto de algunas cadenas nacionales ante un hecho tan importante.
Sala del juicio |
El caso de Gabriel Cruz no es el
único, pero, dada la voluntad familiar inequívocamente prestada y que la
familia nos ha trasladado, es una oportunidad idónea para reflexionar sobre qué
tipo de información sobre casos judiciales queremos e, incluso, emular las
prácticas periodísticas de algunos países de nuestro entorno, más respetuosos
con estos temas.
La magistrada de la Audiencia Provincial de Almería Alejandra
Dodero Martínez, que ingresó en la carrera judicial en 2002, presidirá
el juicio con jurado popular contra Ana Julia Quezada, de 45 años, por
el presunto asesinato del pequeño Gabriel Cruz Ramírez en una finca de
Rodalquilar la tarde del 27 de febrero de 2018. Su historial,
adelantado por Javier Pajarón, de La Voz de Almería, cuenta
con la instrucción de procesos tan llamativos como el llamado Caso
Cheques, desfalco de dinero público de la Consejería de Medio Ambiente de
la Junta de Andalucía, o el Caso Tres Reyes.
Un jurado popular determinará
la culpabilidad o no de la asesina confesa Ana Julia Quezada, defendida
por Esteban Hernández Thiel y Beatriz Gámez. El letrado de la acusación en nombre
de la familia del niño la ejerce Francisco Torres y su equipo de abogados con
su hermano Miguel Ángel a la cabeza. El ministerio público está representado
por la fiscal Elena Fernández Lora que exigirá el pago del coste de la búsqueda
del pequeño, tras la evaluación realizada por la guardia civil. El actual
responsable de la Guardia Civil en Alicante, coronel José Hernández Mosquera,
fue el jefe de Operaciones en la Comandancia de Almería y dirigió la búsqueda
del niño Gabriel Cruz.
El Caso Almería ha sido hasta el momento la vista oral que más tiempo ocupó en la Audiencia
Provincial de Almería, presidida por José Jiménez y como Fiscal Jefe José María
Contreras. Aquí el letrado acusador particular fue Darío Fernández quien marcó
un hito histórico al lograr que los guardias civiles procesados y condenados se
sentaran en el banco de los acusados con ropa ordinaria y no de guardias civiles.
Este juicio fue objeto de editoriales en los grandes medios de comunicación
escritos y audiovisuales. En 1981, se produjeron las muertes de tres jóvenes
inocentes, Juan Mañas Morales, de Pechina, y sus compañeros de trabajo que
vinieron desde Santander.
Aunque la televisión no reinaba de la forma que lo
hace ahora, fue el propio José María Contreras el que reflexionó sobre los
juicios mediáticos y comparó el del Caso Almería, celebrado en 1982, con el
Crimen de Nijar de 1928 y que inspiró a García Lorca para sus Bodas de
sangre, aspecto que recogemos en nuestro libro ¡Llévame
contigo, ahora o nunca! Los periódicos ofrecieron un resumen del fallo
de la sentencia que condenó al jornalero José Pérez Pino, de 43 años, cuñado de
Francisca Cañadas, a la pena de ocho años de prisión, un mes y un día de
arresto mayor, cien pesetas de multa, accesorias y costas correspondientes. Y a
más de diez mil pesetas de indemnización a los herederos del interfecto.
Francisca Cañadas (Paca la coja) afirmó ante el tribunal que “ante Dios casada,
para el mundo una desgraciada”. La representación fiscal la ejerció el
letrado Ruiz de Luna. La acusación particular corrió a cargo del abogado,
periodista y político Ginés de Haro. La defensa estuvo representada por Plácido
Langle. La sentencia está firmada por Luis de la Torre Leiva, Pelegrín Benito
Landa, y Gregorio Azaña Díaz, hermano del presidente de la Segunda República
Manuel Azaña. Antes de todos esos juicios, en 1922, hubo, en Almería pero se
juzgó en Valencia, un crimen machista y el de un niño, Manuel Aguilar, aprendiz
de imprenta. La actriz Concha Robles Pérez (Almería, 1887-1922) intervenía en
el Teatro Cervantes cuando fue asesinada por un marido celoso y machista, el
oficial Carlos Verdugo Boti. En el Consejo de Guerra celebrado en Valencia, se
demostró que recibía malos tratos desde que se casó.
Los periodistas
debemos asegurar el derecho a la presunción de inocencia, tal como advierten
desde el Consejo Audiovisual de Andalucía que preside el periodista, exdecano
de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Sevilla, Antonio Checa Godoy
(Jaén, 1946), exdirector de Diario de Granada, Huelva Información y Andalucía
Económica, entre otros medios.
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