El pódcast toma ventaja y una periodista en constante innovación lo sabe porque hoy es una autoridad sobre el lenguaje en los medios y en la sociedad. La laureada Mar Abad (Almería, 1972) apuesta por el futuro del pódcast y ha fundado un sello que se llama El Extraordinario, junto a su socio Marcus Hurst.
La audaz Mar Abad, fundadora de Brands&Roses y de la revista Yorokobu, es la periodista almeriense más laureada fuera de la esfera regional. Tiene mucho ingenio con una calidad humana muy sólida ante cualquier cínico. “Hacer el pódcast Vacunas me está haciendo muy feliz. Era un reto de agarrarse a la silla porque se juntaron varias cosas: crear una empresa nueva, aprender a hacer pódcast y hablar por primera vez de divulgación científica. Y el resultado está siendo fantástico. Todo el conocimiento científico es de Ricardo Cubedo, un doctor de gran reputación que explica a las mil maravillas, y luego ya vamos el diseñador de sonido y le ponemos los faralaes para convertirlo en un pódcast envolvente, inmersivo y entretenido.
En Vacunas explicamos cómo funciona nuestro
sistema inmunitario, qué son los virus y cómo funcionan las vacunas. Es ciencia
rigurosa con referencias a la ciencia ficción para hacerlo una especie de
"cuento junto a la hoguera" (el formato milenario más humano)
Abad consiguió el Premio Nacional de Periodismo Miguel Delibes, 2019, por El lenguaje impaciente y finalista del Premio Internacional de Periodismo Colombine por Violeta, la periodista que impulsó la liberación de la mujer a principios del pasado siglo. Son algunos de los premios. Uno de los últimos fue el Premio Don Quijote de Periodismo por Cómo ha cambiado el español en los últimos 80 años.
¿Qué importancia tiene el pódcast para aumentar audiencia de la radio?
El pódcast crea el hábito de escuchar
y de informarnos mediante la escucha. Nos está acostumbrando a escuchar
mientras cocinamos, hacemos deporte, vamos de camino al trabajo... Incluso está
fomentando el hábito de sentarte, ponerte tus auriculares y dejarte llevar por
la historia que estás escuchando.
Por los datos que tengo, la radio está llevando más oyentes al pódcast que el pódcast a la radio. El pódcast ha aprendido muchísimo de la radio y la radio ahora puede aprender mucho de los pódcast. Los dos cumplen la misma función: informar, entretener, acompañar e incluso hacer piezas que se pueden considerar arte sonoro. Lo fantástico de este momento es que hay una vuelta importante a la voz. Las décadas de 2000 y 2010 hubo más lenguaje escrito que jamás en la historia porque las tecnologías que teníamos a mano nos llevaban a escribir. Hoy la tecnología nos vuelve a llevar a la comunicación predominante en la historia de la humanidad: la voz hablada.
Los pódcast que más le interesan son los
que le transportan a otros lugares. Este tema lo abordaremos en otra
entrevista. Las palabras son una constante en su trayectoria.
Mi nuevo trabajo, y mi nueva pasión, es un sello de pódcast llamado El Extraordinario. Acabamos de nacer y empezamos con dos series de pódcast: Vacunas (divulgación científica) y La fucking condición humana (historias sobre el miedo, la valentía, la relación con los pájaros... sobre nuestra esencia de humanos). Las palabras trata a los vocablos como si fueran personas. Hablo de su historia, de su evolución, de la forma en la que va cambiando su significado... Y lo hago desde una mirada periodística. No hablo de ortografía ni de gramática. No me interesa qué es lo correcto según la norma. Me interesa cómo los distintos grupos de personas viven y sienten las palabras. Este pódcast lo he hecho con Podium Podcast y me hace muy feliz trabajar con ellos porque son pioneros en España.
¿En qué te ha cambiado la covid-19?
Me ha cambiado mucho y a mejor. El comienzo de la pandemia fue desastroso. Me llevé el golpetazo más salvaje de mi vida y fue tal sacudida existencial que decidí vivir cada segundo de mi vida con toda la importancia que tiene. Así que fuera miedos, fuera inercias, fuera tonterías. Nada de vivir como un zombi y dejarse llevar. Tienes que intentar hacer lo que quieres y, sobre todo, rodearte de la gente que quieres. Y eso me llevó a dejar mi anterior empresa y fundar una nueva con personas que admiro muchísimo. ¿Es arriesgado dejar algo y lanzarte a la incertidumbre? Mucho. Pero la vida es un reto diario. Y llevar una vida que no deseas es desaprovechar un regalo precioso: “la vida” en toda su amplitud.
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