La Junta de Andalucía ha retomado el proyecto de una nueva vía de conexión entre la autovía A-7 y el Puerto de Garrucha para los camiones del yeso de Sorbas, que dificultan el tráfico de la A-370 entre Los Gallardos y Garrucha. Se trata de una idea planteada hace ya más de una década en el seno de la administración autonómica que no se realizó entonces por falta de disposición presupuestaria.
La actual carretera A-370 entre Los Gallardos y Garrucha |
La consejera de Fomento, Marifrán Carazo, anunció ayer en el Parlamento que ya está en marcha el estudio informativo de la nueva vía que tendrá una longitud de ocho kilómetros y que podrá estar disponible a comienzos de 2022.
El Puerto de Garrucha es la única instalación andaluza con tráfico comercial de mercancías relevante y uno de los principales muelles graneleros de España. El año pasado facturó 7,1 millones de toneladas de yeso que reportaron, solo por el negocio extractivo para los distintos agentes, 45 millones de euros, con un tránsito de 362 barcos y un crecimiento del 7%.
Es, con diferencia, para el Gobierno andaluz, su instalación más rentable, su joya de la corona, algo de lo que el municipio de Garrucha, hasta ahora, no se ha beneficiado. De hecho, la instalación no paga IBI y la superficie es gestionada de forma autónoma por la Agencia Pública de Puertos de Andalucía como una ‘pequeña Gibraltar’ independiente del pueblo.
Son más de mil camiones diarios -más que vehículos de hortalizas salen de los invernaderos a Europa- los que asaetean al pueblo de Garrucha, con un tráfico rodado insufrible, sobre todo durante la temporada estival y con un alto riesgo de peligrosidad al utilizar la carretera variante por donde circulan turismos y motocicletas y dejando un eterno rastro de polvo de mineral.
Carazo ha señalado que la ejecución de la carretera irá de la mano de la ampliación del Puerto comercial de Garrucha, a escasa distancia de las viviendas, cuyo estudio de viabilidad ya está siendo informado por un importe de 127.446 euros y cuyo plazo ya ha vencido.
Las canteras de Sorbas están a 30 kilómetros de Garrucha y se ha convertido en los últimos años en una de las actividades más lucrativas de la provincia. También se exporta caliza, puzolanas, mármol triturado y gravilla. El destino del yeso de Sorbas, que explotan Iberplaco y Torralba, es sobre todo América y Africa.
Garrucha exporta el doble que Carboneras y Almería juntos y sin embargo no es puerto de Interés general como los otros dos.
Una obra más que necesaria para no hundir a un pueblo
La cantera de yeso de Sorbas es la segunda más grande del mundo y hay reservas, según sus concesionarios, para ocho décadas, unidas a las cinco que llevan en explotación 'in crescendo'. La actividad da empleo principalmente al sector del transporte de la comarca, aunque las labores de carga y descarga han sido cuestionadas en los últimos años por los vecinos. La Asociación Las Marinas ha demandado que se apliquen las medidas correctoras y de seguridad acordadas por normativa al Defensor del Pueblo Andaluz y que se pueda compatibilizar con la actividad turística.
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