2022 deber ser el año de la recuperación económica de nuestra ciudad. La apuesta del Gobierno de España por nuestra tierra, con más de 320 millones de inversión, ha de venir acompañada por un presupuesto municipal acorde a las necesidades de Almería. Aunque la pandemia no ha terminado y es preciso mantener medidas de protección y prevención ante el contagio, podemos afirmar que la ciudad de Almería está experimentando un resurgir, tras los meses de confinamiento y aislamiento social, que, sin duda, tendrá una repercusión muy positiva sobre el empleo, principal preocupación en este momento para las familias almerienses.
Las medidas puestas en marcha por el Gobierno de España, a través de expedientes de regulación temporal de empleo para las empresas afectadas, han permitido a los trabajadores amortiguar el efecto de la crisis. A ello se suma también la aprobación por parte de la Unión Europea del mayor paquete económico de ayudas de su historia, los denominados Fondos Next Generation, que supondrán un bálsamo para las economías locales en aquellas ciudades donde sus mandatarios sean capaces de aprovecharlos al máximo para paliar los graves efectos de la crisis. En nuestra ciudad tenemos serias dudas de que estos fondos alcancen su objetivo, ya que el alcalde solo ha solicitado proyectos por valor de 16,3 millones de euros, de los más de 1.880 millones concedidos para la comunidad autónoma.
Fruto de nuestro trabajo constante con los colectivos empresariales, profesionales, sociales y laborales afectados, y de nuestro proyecto de ciudad, nacen buena parte de las propuestas que planteamos al Presupuesto Municipal para este 2022 con el fin de dinamizar la economía local y de proporcionar a los almerienses el apoyo que esperan recibir de la administración que sienten más próxima: su Ayuntamiento.
Frente a la mala gestión del Partido Popular con nuestros recursos públicos, que acumula más de 70 millones de euros en sentencias judiciales, y la falta de transparencia y la improvisación a la hora de contratar servicios, como ha pasado esta Navidad, desde el PSOE apostamos por una gestión abierta y participativa, donde los almerienses sepan a dónde van a parar todos y cada uno de los euros invertidos. Inversiones que deben llevar a modernizar nuestra ciudad, nuestros barrios y las comunicaciones entre ellos.
Antes de emprender grandes obras o grandes proyectos, el alcalde debe examinar cómo está Almería y las graves carencias que sufren todos los barrios de su término municipal, desde los más alejados al centro, hasta el mismísimo Casco Histórico, así como la falta de seguridad y de un servicio de limpieza que funcione realmente, servicios que son transversales a toda la capital. Los almerienses tienen que saber que cada mes pagamos 3 millones de euros por el servicio de limpieza y mantenimiento, y a la vista está que algo falla.
A los socialistas nos preocupa la situación de nuestros jóvenes, los que tienen que abanderar el futuro de nuestra ciudad. Difícilmente podrán hacerlo si no tienen la posibilidad de comenzar su propio proyecto de vida, a causa del precio prohibitivo de la vivienda, incluso la de alquiler. Las políticas del Partido Popular se han demostrado insuficientes para dar respuesta a este problema y desde el PSOE hemos presentado una batería de medidas que han sido rechazadas por completo por el alcalde, incapaz de acordar y negociar absolutamente nada con el principal partido de la oposición. Su política de ordeno y mando está llevando al Ayuntamiento a un callejón sin salida a causa de las deudas.
Nuestro modelo de ciudad busca reactivar nuestra economía local y el fomento del empleo, centrando las políticas públicas en nuestros vecinos, en nuestros barrios y en el fortalecimiento de los servicios públicos. Ése es el contrato que suscribimos con los almerienses y por el que lucharemos en este 2022 que acabamos de comenzar.
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