Días, noches, tardes, veinticuatro horas al día, siete días a la semana, los 365 días del año. No hubo forma de diferenciar en qué franja horaria me encontraba, tan solo, y a la vez tan acompañado de mi flexo, mesa, ordenador, cúmulos de libros, apuntes, resúmenes. Esa ha sido mi vida, una vida que elegí, nadie me la impuso, para conseguir una plaza de funcionario.
Dice ahora el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) que no podemos mantener de manera indefinida trabajadores con cierta inestabilidad laboral perpetuando los contratos, que debemos reducir la temporalidad convocando y estabilizando plazas, al parecer genera inseguridad jurídica; claro que no se han dado cuenta que declarar a este, nuestro país, jurisprudencia contraria a derecho europeo, supone un arma de doble filo.
Lazarillo de Tormes: “ni oro ni plata te puedo dar, pero sí muchas enseñanzas para vivir”. El protagonista es pícaro: es pobre, su conducta está marcada por el engaño, la astucia y la trampa ingeniosa.
Puestos a ser creativos no hay lugar, concejo, pueblo, provincia, ciudad… en el mundo que nos ganen, en ese nuestro mundo somos los mejores, y sí, lo digo con orgullo; la maquinaria ha entrado en funcionamiento. ¿Cómo puede conseguir que mi vecino, amigo, hermanos o simplemente a los que debo muchos, muchos, favores consigan una plaza a perpetuidad sin hacer absolutamente nada? ¡Eureka!, el TJUE se ha pronunciado.
Leí el tablón de anuncios de un pueblo perdido en la Sierra de los Filabres, Las Tres Villas, pero ¿quién sabe dónde está ese lugar? Y menos en Almería. ¡Ah, mira por donde!, el mismo asesor jurídico de la Excelentísima Sra. Alcaldesa-Presidenta, doña Virtudes Teresa Pérez Castillo, consiguió entrar como personal laboral administrativo en el Ayuntamiento. Se realizó una mesa de contratación y solo se presentó una persona. Justamente la misma persona que trabajaba en el Ayuntamiento de Carboneras. ¿Pero quién más se enteró de esa plaza?
Muchas coincidencias sucedieron en el consistorio tras el cese de la anterior secretaria que ejercía en las Las Tres Villas. Qué casualidad que solo un abogado del mismo partido que la alcaldesa se presentara y también casualidad que compartiera al secretario el Ayuntamiento de Las Tres Villas con el Ayuntamiento de Abrucena.
Otro caso curioso también sucedió en el mismo pueblo, cuando en la convocatoria de Dinamizador de Guadalinfo tampoco se enteró nadie, excepto la hija de la alcaldesa, que fue la única persona que se presentó a la plaza.
Ahora viene lo bueno, que el TSJE dice: “Hay que estabilizar”. Adivinen, sí, adivinen. ¿Quién va a conseguir una plaza de técnico de gestión (jurídico) por la cara? ¡Muy bien!, han acertado, el asesor/amigo, lo que quieran, de la Sra. alcaldesa, entre otros.
Intento cerciorarme de lo acontecido, me dispongo a llamar al Ayuntamiento y una Sra. muy agradable me informa que este Sr. se encuentra indispuesto, vamos, de baja laboral. ¡Qué extraño todo! Si nunca lo he visto por el Ayuntamiento, se supone que lleva años trabajando en Las Tres Villas y no sé qué cara tiene, quizás es que ha coincidido que en las múltiples ocasiones que he ido al Ayuntamiento solo me he encontrado a las mismas amables trabajadoras desde hace años, pero ningún hombre trabajando por allí…
Pero…, sí, he visto al abogado en prensa, con un fedatario público en la adquisición de un inmueble. ¿Coincidiendo con una baja laboral, puede estar trabajando y salir en la prensa sin ningún reparo? ¿Por qué a mi vecino autónomo lo pillaron en su empresa estando de baja y le multaron?
Son las cinco de la tarde, voy a seguir estudiando, ya he perdido demasiado tiempo en lamentaciones, es mejor ser ciego y sordo porque el lazarillo tuvo su maestro y yo sólo me tengo a mí mismo. Estamos hablando de Las Tres Villas, pero desgraciadamente esto sucede en toda España y ni es noticia, es lo común…
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