Homenaje a Rocío Jurado: la revista ¡Hola! patina

Nuria Torrente

@opinionalmeria

Como cada mes de junio, coincidiendo con el aniversario de la muerte de Rocío Jurado, la denominada familia mediática de la cantante se ha desplazado a Chipiona para rendirle su particular homenaje. Ha asistido a una misa, ha visitado el cementerio y ha posado ante el monumento levantado en homenaje a La Más Grande, que este año ha lucido más esplendoroso que nunca gracias al adorno floral realizado por Rocío Carrasco, según informó el alcalde de Chipiona, Luis Mario Aparcero, en el homenaje anual oficial, celebrado el día 1.

La revista ¡Hola! dice que la familia mediática realizó una visita al Museo, algo que es incierto

Para cualquier espectador independiente lo normal hubiera sido que los miembros de la familia también se hubieran desplazado al Centro de Interpretación de Rocío Jurado, lugar de acogida de los simpatizantes de la chipionera, que está a punto de alcanzar las 50.000 visitas. Pero esa visita no se ha realizado. ¿Motivo? Solo hay uno: todas las pertenencias del museo de Rocío Jurado son propiedad de Rocío Carrasco, su heredera universal, quien percibe mensualmente una cantidad en un convenio firmado con el Ayuntamiento. Si los miembros de la familia mediática hubieran decidido visitar el museo se hubieran visto obligados a pasar por taquilla como el resto de los mortales.

En personas que tienen un comportamiento normal, lo normal hubiera sido realizar una visita al museo, pero no ha sido así. No obstante, la revista ¡Hola!, por boca de su redactora Ana Dorado, ha querido darle carácter de realidad a lo que hubiera tenido carácter de normalidad. Y ha escrito que "posteriormente, la familia Mohedano se ha dirigido al Museo de Rocío Jurado". No es cierto. ¡Hola! ha patinado y, lo que es peor, muchas horas después de conocerse la realidad, la revista sigue sin rectificar. No se tiene constancia de que ningún miembro de la familia mediática de Rocío Carrasco haya visitado el museo en honor a su madre. Conviene recordar que previamente a la apertura del museo esas mismas personas clamaban en los medios de comunicación por su apertura, de cuya tardanza culpaban, obviamente, a Rocío Carrasco.