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La audiencia-viuda de Sálvame

Marián Lozano
@marian65x

La vieja audiencia de Telecinco, esa que abandonó a la cadena al mismo tiempo que se canceló Sálvame, ha retornado a Telecinco y lo hace como el Guadiana, apareciendo y desapareciendo entre las 10 y las 11 de la noche desde el estreno de Cuentos Chinos.

Mediaset está recibiendo el castigo de un público fiel a Sálvame que no le ha perdonado y que por muy contradictorio  que pueda parecer, le levanta el castigo de lunes a miércoles en este horario por un único motivo, premiar a La Fábrica de la Tele y a Jorge Javier Vázquez.

El programa no está recogiendo cifras brillantes, en sintonía con el resto de programación del grupo porque Telecinco no levanta cabeza y ve como su competencia más directa, la cadena de Atresmedia, toma distancia en la carrera de las audiencias. Estos datos no son motivo suficiente para que los seguidores del dueño del cortijo, porque siempre lo será aunque se lo hayan expropiado, den la espalda al programa.

Cuentos a Chinos anoche vivió uno de los momentos que los usuario de Twitter elevaron a la condición de “súper emotivo” a través de sus tuits y no fue otro que el reencuentro en pantalla y en pleno directo de Jorge Javier Vázquez con sus excompañeras de Sálvame Lydia Lozano y Belén Esteban. El encuentro televisivo tuvo lugar con motivo de la presencia de varios compañeros de Terelu Campos  y Carmen Borrego en la misa funeral que se acababa de celebrar en la madrileña localidad de Pozuelo en honor de María Teresa Campos.

Minutos después de la charla a tres que se produjo entre Jorge, Lydia y Belén, La Fábrica de la Tele recogía las siguientes palabras del presentador y las difundía en un tuit “Os veo y me doy cuenta de lo que os echo de menos”. Esta misma frase fue utilizada por muchos seguidores de la cuenta de la productora para lanzar el mismo mensaje a Sálvame y a sus colaboradores: Os veo y os echamos mucho de menos.

Y es que el programa ha dejado viuda a una audiencia que no termina de cerrar su duelo tras un largo matrimonio de 15 años con el programa. 

Cuentos Chinos, quizá, hace más llevadero ese duelo para el espectador pero al mismo tiempo abre la herida cada día durante su emisión y ese público dolido sigue responsabilizando a Mediaset de la partida “al más allá del show” en la que alojan eternamente a los programas míticos que nunca serán olvidados y que formarán parte de la historia de la televisión y de la memoria del espectador.

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