En Almería ciudad hay más de 33.300 jubilados que van ver incrementada su pensión notablemente este año con arreglo al coste de la vida, gracias al paquete de medidas aprobadas por el Gobierno progresista presidido por Pedro Sánchez. Además, todos los almerienses se verán beneficiados por la bonificación a los transportes públicos, la bajada de la factura de la luz y el gas, la rebaja del IVA de los alimentos, la prohibición a los bancos de cobrar comisiones en ventanilla y otras muchas medidas contenidas en el Real Decreto del Gobierno para paliar los efectos de la crisis generada en España por la guerra en Ucrania.
A todas esta medidas el PP, aliado con los neofascistas de VOX, votó en contra, demostrando que vive instalado en la frustración de haber perdido las elecciones el pasado 23 de julio y que su único objetivo es alentar la crispación en las instituciones y en la calle, al precio que sea. Esta forma de hacer política, contra la gente, lo inhabilita como alternativa y consolida su férrea unión con la extrema derecha.
Votan en contra, pero donde gobiernan no dudan en aplicar sus beneficios. Antes incluso de aprobarse este decreto, los mandatarios del PP en el Ayuntamiento de Almería y en la Junta de Andalucía, ya se sumaban a la iniciativa de bonificar el transporte público. Pura hipocresía.
Esa oposición destructiva considera que todo aquello que es bueno para la mayoría social es malo en términos electorales para ellos. ¿Para qué están en política ? ¿Para ilegalizar partidos? ¿Para reivindicar un pasado al que nadie quiere volver?
Se niegan a aceptar que los acuerdos a los que está llegando el PSOE son la manifestación de la diversidad de nuestro país. Frente a la España en blanco y negro, censora y monolítica, de PP y VOX , está la España real, la de la gente que madruga, que va apagando luces por la casa, que hace cuentas en el supermercado, ésa a la que tanto apelan en sus eslóganes y que luego olvidan en su acción política.
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