Rocío Carrasco ha sido esta semana portada en la revista Lecturas.
Tras 25 años como pareja, ocho de ellos en forma de matrimonio, ella y Fidel
Albiac han dado el paso de casarse por la Iglesia. “Nos haría mucha ilusión
celebrar las bodas de plata casándonos por la Iglesia, igual que en su día nos
casamos por lo civil en una celebración de gratitud para todos los que habían
estado con nosotros todo el tiempo. Siempre dijimos que cuando hiciéramos 25
años nos gustaría dar el paso de casarnos por la Iglesia”, ha confesado a la
revista. Entresacamos otras declaraciones de la exclusiva a la popular revista:
Rocío Carrasco, en Lecturas |
Fidel Albiac: “La primera vez que lo vi dije: “No sé cómo ni
cuándo, pero es mío”. Amor a primera vista, sí. Físicamente, qué duda cabe que
me encantó, pero iba más allá y no lo conocía. Sentí que había algo, una
conexión que se va fortaleciendo según vas conociendo a la persona. Es muy
importante ese pellizco. El corazón me dio un vuelco literal. Pasa muy pocas
veces en la vida, a mí solo una vez. Empezamos siendo amigos, unos cuatro o
cinco meses. Después del accidente nos fuimos a vivir juntos”.
Lo que supone Fidel: “Es todo. En la pareja lo más importante es
la admiración, y él siempre me ha despertado una admiración profunda. Siempre
ha estado, además de una forma altruista. ¡No tenía necesidad!”.
Críticas sobre Fidel: “A nosotros como pareja no nos ha afectado
nunca, en absoluto. No han movido nuestros cimientos. Éramos y somos sólidos y
firmes, como rocas el uno para el otro. Ahora, que a él le afectase
personalmente y a mí también por lo que conllevaba, sí. Igual que a él le ha
afectado cuando he sufrido yo”.
Sin ayuda en casa: “Me apaño mucho mejor con mi marido que teniendo ayuda en casa. Compartimos todo lo que tenemos que hacer".
Exclusiva en Lecturas |
No soy ejemplo de nada: “Hay mucha gente a la que le ayuda verme bien y me enorgullece, pero no me gusta regocijarme en que soy ejemplo de nada. Yo no he sido valiente por contar mi historia, lo hice por mí, porque yo lo necesitaba. Si eso ha servido para algo más, la primera que da las gracias, soy yo”.
¿Los mismos invitados?: “La familia ha crecido. Tengo durante este
tiempo mucho que agradecer a mucha gente”.
Bake Off: “Para mí ‘Bake Off’ ha sido muy importante, he podido
ser yo, he disfrutado. ¡Tiene narices tener que decir he podido ser yo! Soy
así. Siempre he sido y soy una persona muy disfrutona, otra cosa es que haya
podido disfrutar”.
¿Feliz?; “Soy feliz. He aprendido que cuando las cosas son, son, y
cuando no son, no son. Ser consciente de eso te hace sentir bien, asumes que no
puede ser todo en la vida y que dentro de todo eres una puñeterísima afortunada.
Cuando uno asimila eso, que ha tenido que ser después de mucho tiempo y de
mucho vivido, llegas a entender que eres feliz”.
Pudor: “Cuando vamos con el musical, salgo llorando porque la gente te cuenta y te da las gracias. Me da mucho pudor porque no he descubierto la penicilina, pero lo agradezco en el alma, no tendré vida para agradecer todo lo que la gente me transmite. Salgo de allí emocionada, pero no por mí, nací sin ego, sino porque te satisface ver que hay gente a la que haces feliz o has aportado algo”.
La serie sobre sus padres: “Está en fase de preproducción, en una
fase inicial, ultimando primeros guiones. Es la historia de mi padre por un
lado y de mi madre por otro, y cuando confluyen se cuenta su vida en común. Es
emotiva, llamativa y muy de verdad. Si todo sale como queremos, va a ser un
proyectazo. Vamos a contar la verdad, la realidad de sus vidas. Vais a
descubrir muchas cosas, ellos no las contaron. Son dos vidas muy diferentes, la
historia real de mi padre es más llamativa porque se conoce muy poco de su
principio. En EE UU se han inventado a Rocky Balboa, cuando aquí lo tenemos. Es
una vida de sacrificio, de venir de la nada de otro país, tenemos la historia
que se han inventado otros”.
El musical: “Hacer el musical sobre mi madre me sirvió
terapéuticamente. Embarcarte en algo así conlleva tener que ocupar tu mente en
otra cosa y va restando sitio a la oscuridad. El musical tiene un componente
emocional muy grande. En ese momento no estaba feliz pero me dio mucho empuje. Estoy
muy feliz, vamos con el musical al teatro Albéniz de Madrid del 28 al 30 de
junio”.
Su madre, más presente que nunca: “Sí y hace 16 años que se fue.
Queríamos que ella fuera accesible a todo tipo de público. Que las personas que
la conocieran la siguieran teniendo, que las que no la hubieran escuchado antes
lo hicieran y que las generaciones nuevas la descubrieran. Lo hemos conseguido,
en los teatros nos encontramos personas mayores, jóvenes, niños con sus padres”.
El homenaje de Rosalía a su madre: “Fue maravilloso. Lloré. Era solemne, lo hizo con un respeto sumo. Hizo un homenaje a la esencia de mi madre, se le notaba la admiración por ella”.
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