Mojácar y su sensualidad para todas las estaciones del año

Antonio Torres
Periodista

Mojácar es pionera del turismo británico. El Parador Reyes Católicos, inaugurado por Fraga, en 1966, consolidó una industria creciente. Mojácar lidera el turismo, ciudad para todos los tiempos. Fueron pioneros con los primeros hoteles, el rodaje de la primera película y el punto de encuentro de intelectuales. Una inspiración permanente.  Merece la pena mirar en el retrovisor para saber de dónde venimos y la transformación brutal de crecimiento y de demanda de la actualidad. Se abre un futuro enorme que sea compatible con salvaguardar el medio ambiente, la vida. La transformación de la zona de la playa y el caso histórico durante el último medio siglo es brutal. Si observamos las imágenes que nos dejó en 1935 Robert Gillon pensaríamos en la desaparición total de la capital del Indalo. Gillón, presidente del Senado belga y gran amante de España, realizó varios reportajes fotográficos durante su gira por España. En 1947, la Dirección General de Turismo de España utilizó varias de sus fotografías para campañas turísticas. Robert Gillon fue un destacado hispanista, habiendo escrito importantes obras sobre España. Autor de cinco volúmenes bajo el epígrafe Silhouettes espagnoles. Fotografió el casco urbano de Mojácar. El atractivo de la Fuente con el símbolo de la mojaquera de amarillo con el cántaro a la fuente, antiguo lavadero. Es innegable el valor histórico de la entrega de la ciudad a Garcilaso de la Vega por parte de Alavez, “alcaide”, el musulmán que se sentía mojaquero. Desde otra parte de la ciudad, el Arco con el Escudo de Mojácar sigue siendo, cada atardecer, el más fotografiado con el turismo de playa se presta a recorrer una de las ciudades más hermosas.

La Fuente de Mojácar en 1935, fotografiada por Robert Gillon, que fue presidente del Senado de Bélgica. ARCHIVO GENERAL DEL ESTADO ESPAÑOL

El cine con decenas de rodajes es un complemento para explicar el éxito de ocupación que sigue captando el interés de los turistas, solo por detrás de la mayor poblada Roquetas de Mar. Se cumplen 70 años de la proyección en San Sebastián de Sierra Maldita que lanzó cinematográficamente a la provincia de Almería. En la década de mediados del siglo pasado comenzó a abrirse paso un cine con mejores medios. El día del cine español se celebra cada seis de octubre. Ese día de 1952 finalizó oficialmente el rodaje de Esa pareja feliz de Luís García Berlanga y Juan Antonio Bardem, protagonizada por Fernando Fernán Gómez. En Garrucha, Níjar y Mojácar se rodó Sierra maldita, Concha de Plata del Festival de San Sebastián en 1954 y Medalla del Círculo de Escritores. Fue el primer western rodado en la provincia de Almería. Sierra maldita, dirigida por Antonio del Amo e interpretado por Rubén Rojo, Lina Rosales y Manolo Zarzo. Ofrece un panorama desalador y de pobreza extrema de Mojácar que se puede trasladar a muchos pueblos. Nos retrata de alguna manera y es conveniente repasarla para saber de dónde venimos. Hace 70 años de todo ello. Una de las pioneras en el montaje y la técnica cinematográfica fue Pepita Orduna que trabajó en ¡Bienvenido, Mr. Marshall! (1953), dirigida por García Berlanga. La gran pantalla dio el espaldarazo a Mojácar en la playa exótica del Sombrerico con parte del rodaje, en 1972, de La isla del tesoropelícula de 1972 protagonizada por Orson Welles, película para la que trabajó como traductor mi hermano Andrés, políglota. Martín Hache con fotografía de Porfirio Enríquez quien en línea con Pérez Siquier me comentó una noche en Kiosco Amalia que como la luz de Mojácar y de todo el Cabo de Gata no hay nada mejor para los profesionales. En el ámbito cinematográfico recuerdo la entrevista que le formulé a Jack Nicholson en el hotel Moresco, cuando uno era joven, feo, católico, ignorante y sentimental como diría Valle-Inclán. Supo tolerarme con mis limitaciones, o con un pobre inglés de instituto e invitarme a una copa en la que hizo de intérprete una mujer sudafricana del equipo de diseñadoras. Me sorprendió su sencillez. Eso también ocurrió con Antonio Banderas, Medalla de Andalucía. Me pidió una calada de un cigarrillo, cuando me dio la primicia nacional de que estaba cansado de verse en todas las carteleras de la Gran Vía madrileña. Que se iba a Hollywood y a toda América. Consiguió un reconocimiento global. La buena gente se reconoce y ahí está con las iniciativas que emprende en su Málaga natal. Esa entrevista la publiqué en la revista Tiempo por encargo de Santiago Sánchez Tráver. La entrevista con Banderas en el hotel San José, tiempos de los inolvidables Rosa y Eduardo. En Mojácar se han rodado series y grandes producciones. 

Mojácar es la ciudad más conocida y quizá la más fotografiada de Almería. Se aprecia un cambio generacional, incluso con la nueva corporación municipal. Nada tiene que ver con el silencio y los tortuosos accesos que nos trasladaban a la etapa árabe, sin olvidar que hay zonas costeras que se asoman al ascensor del lujo como pretende la multinacional Cosentino en Macenas. En boca de todos está, cuando se mejoren los accesos, el gran puerto de lujo, con todo lo que ello representa. Dicen que el pasado ayuda a entender el presente y el futuro. El alcalde Fran García es consciente, al igual que este periodista desde que empezó su trayectoria profesional, que el nombre propio de ciudad abierta, necesita repensarse para no quedar atrás. El sector empresarial quiere más y lamentan pérdida del turismo familiar en favor de Garrucha y otros puntos del Levante. Lideran el turismo de ocio juvenil desde los tiempos de la primera discoteca de España, el Pimiento, pero siempre nos queda Mojácar, también para cuando llegue el invierno y se oferte una oferta cultural permanente.

El casco urbano sigue intacto con sus arcos históricos, calles empinadas y la Iglesia fortaleza. Todo ese carácter de apertura la inició el alcalde Jacinto Alarcón. Quiso abrirse al mundo con su empeño por conseguir el Parador de Turismo. Supo dar personalidad propia a los pintores del Movimiento Indaliano encabezados por el veratense Juan Cuadrado, la primera voz que sonó en la inauguración de Radio Almería en 1934, y por supuesto con el padre de todos Jesús de Perceval que supo ver en Mojácar la inspiración para tantos artistas. Se combatió la pobreza extrema, se regalaron solares con una campaña de la que ya hemos escrito en anteriores ocasiones y se mantuvo la personalidad árabe. Ese trabajo por dotar de personalidad a la comarca del conjunto del Levante almeriense la continuó Pedro García que levantó el Complejo Continental que continúa en pie una de sus hijas. Todos los chiringuitos se preparan para afrontar lo que resta de agosto. Desde el renovado Kontiki a los conciertos con plus flamenco de Aku-Aku y Titos con el reencuentro tradicional del gran Jorge Pardo. 

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