La demolición del antiguo edificio de Correos ha
dejado la plaza Juan Casinello en un estado de incertidumbre que tardará muchos
años en resolverse, tras la decisión unilateral de quienes nos gobiernan de
eliminar un inmueble que ha pasado ya a ser historia de la capital. Vamos a
tener que ver durante muchos años el impacto de la medianera resultante, que
será un recordatorio constante del capricho del anterior alcalde de ceder a la
Junta de Andalucía, a su amiga Mari Carmen Crespo, ese solar para levantar el
llamado Smart Green Cube.
Tras numerosas críticas, finalmente se
construirá en el Parque Científico Tecnológico de Almería (PITA), lugar natural
para este tipo de iniciativas. Si la alcaldesa tuviera claro el modelo de
ciudad que desea para Almería no habría pegado este bandazo que nos ha hecho
perder unos valiosos años en el desarrollo del centro de la ciudad. Y vamos a
tener que ver durante muchos años esa medianera blanca porque la alcaldesa aún
no tiene claro qué hacer en la parcela resultante, a pesar de que desde muchos
sectores de la sociedad almerienses sugieren la creación de un espacio cultural
y juvenil como mejor solución para revitalizar ese área o bien una plaza en la
que haya árboles que proporcionen sombra y frescor a nuestras calurosas calles.
La última ocurrencia es encargar un estudio para
estudiar la viabilidad de un aparcamiento subterráneo en dicho espacio. ¿De
verdad es realmente necesario incrementar el número de vehículos en el centro
de Almería cuando las tendencias urbanísticas actuales abogan por reducir la
presencia de automóviles en las áreas más céntricas de nuestras ciudades?
Confiemos en que el Plan Estratégico del Casco Histórico, encargado al Colegio de Arquitectos, arroje sensatez a la falta de decisión y criterio que hasta ahora ha demostrado la alcaldesa. Este emplazamiento clama por un espacio de encuentro donde se fomenten actividades que inviten a la participación de los almerienses en la vida de nuestra ciudad.
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