La irrupción de La Resistencia, el popular programa de David Broncano, emitido durante muchos años en Movistar Plus+, en la televisión en abierto, en La 1, rebautizado con el nombre de La Revuelta, ha hecho correr ríos de tinta, para bueno y para malo. En el horario televisivo que viene inmediatamente después del informativo de la noche, llamado access prime time, el rey de las audiencias ha sido durante muchos años El Hormiguero, de Antena 3, presentado por Pablo Motos. Nadie pensaba que Broncano iba a hacerle sombra a Motos, y, dos semanas después de competencia, así ha sido, pues el programa que se emite en la cadena de Atresmedia aumentado su audiencia. Sin embargo, se está dando una extraña circunstancia: dos semanas después de su estreno, La Revuelta no ha restado espectadores a El Hormiguero, pero sí se ha situado al mismo nivel de audiencia. En concreto, en esta última semana, el nuevo programa ha superado al veterano programa en el tramo horario de coincidencia.
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| Editorial de El País en la edición de Kiosko y Más |
Antena 3 no quiere perder la posición dominante que ha tenido durante muchos años en esa franja horaria y para ello ha tomado varias iniciativas de promoción de su programa, como una fuerte campaña publicitaria en medios ajenos al grupo y la eliminación de la publicidad durante su emisión para evitar migraciones de espectadores. A estas iniciativas se han sumado, por oscuros intereses, otros medios, como el periódico El Mundo, que se empeñan en despreciar lo que supone la irrupción del fenómeno Broncano en la televisión en abierto (todos los días, con más de dos millones de espectadores) a costa de ensalzar la calidad de El Hormiguero, una calidad que, por cierto, nadie ha puesto en duda.
"¿Eres de Broncano o de Motos?" no es una pregunta retórica ajena a la realidad que vivimos hoy los televidentes. En el horario que va de 21:40 a 22:50 de la noche, aproximadamente, cuatro de cada diez telespectadores están viendo El Hormiguero o La Revuelta. La existencia de ambos programas en el mismo espacio temporal es una tema de conversación cotidiano y las redes sociales y los medios de comunicación se inundan de comentarios sobre el hecho. Tal es la magnitud de la importancia de la irrupción de Broncano en la parrilla de RTVE que el diario El País, el de mayor prestigio y difusión de España, ha dedicado al tema uno de sus editoriales, en el que dice, entre otras cosas, esto:
Divertirse sin truenos: "El éxito de
audiencia de La revuelta, el nuevo programa de David Broncano
en TVE, ha sido una sorpresa y un soplo de renovación en
el poco arriesgado panorama audiovisual. Incluso se puede interpretar como un
síntoma de que buena parte de la sociedad busca divertirse sin los truenos del
apocalipsis que resuenan en determinados medios y redes sociales. Quedan muchas
noches de duelo televisivo, pero ahora todos intentan encontrar explicaciones a
los excelentes resultados de su arranque, que casi ningún experto hubiera
vaticinado. En sus dos primeras semanas de emisión, la cuota de pantalla
de La revuelta osciló entre el 17% y el 19%, lo que duplica la
audiencia media de la cadena y la que habitualmente tenía La 1 en ese horario
la temporada pasada. Casi 16 millones de españoles, uno de cada tres, lo han
visto en algún momento".
Público joven: "El programa ha recuperado a un público joven —con días en los que más del 34% de su audiencia han sido menores de 45 años—, a consumidores de plataformas digitales y también de las cadenas privadas de todas las edades".
Registros desenfadados: " Con su llegada a TVE ha demostrado que hay muchos
espectadores deseando ver registros más desenfadados que los que dominan en la
televisión actual, donde apenas ha habido innovación en los últimos años, en
parte debido a la enorme competencia de las plataformas digitales. La mayoría
de los programas son clones de fórmulas repetidas hace décadas".
Reírse es un antídoto frente a la bronca: "Hay un lugar lejos de la polarización malhumorada, que millones de personas creen que no todo se puede leer en clave de trinchera ideológica y que reírse es un antídoto contra la bronca... Broncano ha demostrado que el suyo no es un espacio pensado para la crítica política, al contrario que su competencia directa, El hormiguero, un programa de entretenimiento en el que, legítimamente, es habitual la crítica al presidente del Gobierno".
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