Edita: Fidio (Foro Indalo de Debate, Ideas y Opinión / Twitter: @opinionalmeria / Mail: laopiniondealmeria@gmail.com

Canal Sur tiene la palabra

Emilio Ruiz
@opinionalmeria

La sección “El público tiene la palabra”, integrada en el programa “La mañana de Andalucía”, presentado por Jesús Vigorra, es una de las más populares de Canal Sur Radio.  Se presenta a sí mismo como un programa de servicio público, y realmente lo es. Cada semana –ahora, los viernes-, un experto jurídico se ofrece a la audiencia para dar respuesta a sus problemas legales. El actual asesor es Joaquín Moeckel, muy conocido por sus frecuentes apariciones en cadenas de televisión de carácter regional y nacional. Al oírlo o verlo, se nota enseguida que el abogado sevillano es un profesional muy preparado, una cualidad a la que hay que unir la firmeza de sus convicciones –en televisión o radio no valen las medias tintas- y su afabilidad ante la cámara y el micrófono.

Joaquín Moeckel y Jesús Vigorra, en "El público tiene la palabra", de Can Sur Radio / Canal Sur

Moeckel no ha faltado a su cita este semana con Vigorra pese a coincidir con un día festivo, el de Todos los Santos. Pero, tal vez por eso, por la festividad del día, el abogado no ha disfrutado de una de sus mejores jornadas radiofónicas. A propósito del desastre de la Comunidad Valenciana, el letrado ha comenzado el programa haciendo un cántico al negacionismo medioambiental y el cambio climático. Otra vez ha vuelto a ser la pobre tortuga mora la que ha pagado los platos rotos de alguien que se niega a reconocer la realidad científica. Vigorrra ha callado ante una disertación que podía ser difícilmente compartida. El colmo ha sido darle credibilidad al bulo ultraderechista de la demolición de presas y pantanos.

Tras esta intervención “extraordinaria”, por la situación coyuntural, el programa ha dado paso a la audiencia, esta vez mediante mensajes grabados. El primero en intervenir ha sido un oyente que ha despotricado severamente contra nuestros representantes políticos por su quehacer en Valencia. El hombre ha mostrado su estupor por que no estuviera ya desplegado el ejército en el lugar del desastre. Tanto Moeckel como Vigorra han dejado explayarse el cabreado oyente, pero en ningún momento le han hecho la observación de que, desde esa misma mañana, 500 miembros del ejército de Tierra, solicitados por el presidente de la Generalitat la tarde anterior, estaban operativos en la Comunidad junto a los más de 1.000 efectivos de la UME. Alguien, posteriormente, les debe haber avisado de que esto es así, porque, varios minutos después, sí han hecho referencia a ello. Lo propio hubiera sido no emitir el mensaje grabado..

Siguiente llamada: un oyente pide asesoramiento por un problema con Hacienda. Manifiesta que la Agencia Tributaria le reclama unos recargos de demora por no atender el pago de unos fraccionamientos acordados. El señor explica que la cuenta bancaria habitual, donde tiene domiciliados sus pagos, la ha dejado sin saldo y ha abierto otra en la misma entidad. En esta nueva cuenta se atienden todos los recibos domiciliados en la cuenta anterior, por lo que “no entiendo cómo no han pagado lo de Hacienda”. ¿Solución de Moeckel? “No vale este recibo sí y éste no, si se pagan unos, se pagan todos”. Problema resuelto, sí, señor. A reclamar, al banco. Antes de esa respuesta, el abogado no ha considerado adecuado consultar con la entidad bancaria para conocer su opinión. Tampoco, interesarse por si en la nueva cuenta había saldo suficiente  para atender la deuda de Hacienda. O si la orden de sustitución de cuenta de cargo había sido dada al banco de forma correcta. Mucho menos, no se le ocurre a Moeckel sugerirle al oyente que, ante un cambio de cuenta domiciliaria, conviene poner el hecho en conocimiento de las entidades emisoras de los recibos de cobro para que procedan a girar los próximos cargos a la nueva cuenta.

“El público tiene la palabra” es un arraigado programa de Canal Sur que se ha ganado su solvencia tras muchos años en antena. Es un auténtico programa de servicio público. Por eso es conveniente evitar las respuestas populistas, las exposiciones temerarias o, simplemente, las que pretenden hacer llegar al oyente lo que éste quiere oír.

No hay comentarios:

Publicar un comentario