Rocío Carrasco y Anabel Dueñas han estado esta semana dando una vuelta por el Museo de Rocío Jurado para elegir algunos de los vestidos que la intérprete lucirá en próximas actuaciones del musical. La visita estuvo llena de emoción y nostalgia, ya que Rocío Carrasco, hija de la leyenda, compartió anécdotas y recuerdos sobre su madre mientras recorrían las impresionantes exhibiciones del museo. Juntas, revisaron los deslumbrantes trajes que Rocío Jurado utilizó en sus grandes actuaciones, destacando la historia y la elegancia que cada pieza trae consigo, según informa la página de fans en Instagram, que añade: Anabel Dueñas se mostró entusiasmada con la oportunidad de trabajar con estos vestidos únicos. El objetivo es rendir un homenaje auténtico y conmovedor en el musical que llevará a los escenarios la vida y legado de la gran Rocío Jurado. Ambas expresaron su deseo de preservar la esencia de Rocío y compartir su historia con nuevas generaciones. Sin duda, esta visita fue un paso más en el camino para celebrar la vida de una de las voces más queridas de España.
Uno de los icónicos vestidos que se han incorporado al Museo / Ayuntamiento de Chipiona
Por otra parte, el Centro de Interpretación ha realizado algunos cambios en una de las zonas expositivas del espacio, en concreto en la sección relativa a la temática de carnaval. Y es que, con motivo de la cercanía de esta fiesta, la Delegación de Turismo ha decidido exponer al público un total de cinco nuevos vestidos que han sido seleccionados para la ocasión.
Por
un lado, se encuentra el vestido de piconera que Rocío Jurado lució al ofrecer
el pregón del Carnaval de Cádiz en 1.985. Con este vestido, la artista partió
desde el colegio del Niño Jesús en coche de caballos escoltada por una corte de
piconeras para ser la primera mujer pregonera del Carnaval de Cádiz. Otro de
los vestidos seleccionados ha sido el de fantasía con antifaz que la artista
lució para el Baile de Máscaras en el Gran Teatro Falla, cuya última edición
fue en 1986.
El
tercer vestido que se incorpora es el de Reina del Carnaval de Miami (1986).
Fue realizado por Antonio Ardón y lo eligió Rocío para aparecer ante más de un
millón de personas. Esta fiesta se venía celebrando desde 1978, y la primera
vez que se coronó a un rey fue en 1982. El cuarto vestido que se incluye desde
ahora es el de piconera que uso para el Pregón del Carnaval de Cádiz de Antonio
Martín en 1997, realizado también por Ardón. La universal artista chipionera
interpretó algunas canciones y bailó un tanguillo con el pregonero.
Finalmente, la muestra suma la capa utilizada por Rocío Jurado para el Pregón del Carnaval de Chipiona de 2003. Ante una plaza Pío XII atestada de público, Rocío llegó en coche de caballos acompañada de una multitud de agrupaciones de carnaval. Fue un pregón corto pero muy sentido y cargado de emoción, donde se perfiló una semblanza de su vida, sus recuerdos de niña y sus anhelos por esta tierra, su tierra. Tuvo tiempo de cantar e improvisar algunos fragmentos de diversas coplas. El vestido escogido para esta ocasión era una alegoría de la Estatua de la Libertad y, una vez quitado los elementos externos del disfraz, se quedaba en un sencillo traje color azul, con transparencias y pedrería.
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