El sumario del Parte Inglés, pedagogía para la memoria de Almería

Antonio Torres

Periodista

La edición número siete de las Jornadas de memoria democrática acogieron, entre otros actos, un monográfico sobre el Parte Inglés con intervenciones de familiares de los fusilados y resto de procesados en un proceso lamentable y comprobado injusto desde todos los ángulos. La lucha antifranquista desde la clandestinidad de los primeros años 40 se cobró la vida de una mujer joven. Encarnita Magaña López (Tabernas, 30 de noviembre de 1921-Almería, 11 de agosto de 1942), casada con el anarquista del Barrio Alto de Almería José Hernández Ojeda que fue fusilado también unos meses antes que Encarnita, mujer empática y muy positiva, empleada de la papelería Inglesa, ubicada al principio del Paseo de Almería, bajando desde Puerta Purchena. La joven es un símbolo de la resistencia antifranquista, única mujer fusilada en la provincia durante la posguerra y la represión franquista, junto a siete hombres, dentro del proceso de El Parte Inglés. Al doctor en Humanidades Eusebio Rodríguez Padilla (Almería, 1955), autor de El Parte Inglés, premio de la Asociación de Libreros, exfuncionario del Ministerio de Defensa, se le debe que el primer archivo militar de España se abriera en Almería, gracias a su insistencia e investigaciones. Su tesis doctoral, La justicia militar en Almería: el delito de rebelión militar (1939-1945), le marcó el camino y ya son seis tesis doctorales las que se han leído en la Universidad de Almería, utilizado fondos documentales del citado archivo. “Hasta entonces los procesos militares sin clasificar eran imposible de consultar por la falta de una base de datos descriptiva de sus contenidos. Trabajé con ahínco la búsqueda del proceso de El Parte Inglés que contenía 1.700 páginas y descubrí que estaba en una caja fuerte, como un armario empotrado en el acuartelamiento Cervantes de Granada. Desde año 41, se daba por desaparecida dicha documentación. Cuando lo encontré, mi primera emoción fue llamar con toda la alegría del mundo a mi amigo el catedrático Rafael Quirosa Cheyrouze y Muñoz, actual decano de Humanidades de la Universidad de Almería.  “Uno de los puntos de la sentencia”, metedura de pata gravísima, “hace referencia a que la organización pretendía obtener beneficios de la victoria de Inglaterra y Rusia sobre las fuerzas del Eje, cuando Rusia, en el momento de descubrirse la organización (29/4/41), no había entrado en la guerra mundial y tenía un pacto de no agresión con Alemania. Por lo tanto, nada se podía esperar de victoria rusa”. Hubo 117 encausados. La presión de la calle hizo que la carnicería se dejara en ocho almerienses fusilados en a la derecha de la entra al cementerio de Almería a las 06.15 horas del 11 de agosto de 1942. Fueron acusados de intrigar y querer favorecer la victoria de Inglaterra y la URSS en la II Guerra Mundial por la distribución de un folleto que contenía informaciones publicadas en la BBC. Esa fue la horrible excusa, un disparate. Los presos estaban en El Ingenio, las mujeres en la cárcel de Gachas Colorás y los militares en la Prisión Militar desde donde fueron conducidos en camiones escoltados por la Guardia Civil durante todo el recorrido hasta la celebración del simulacro de juicio, celebrado en la primera planta de lo que es actualmente el Instituto Celia Viñas. Hubo centenares de ciudadanos que protestaron y de ahí que colocaran vallas por las calles y especialmente en las inmediaciones del instituto. “La sentencia se emite el 18 de mayo de 1942, el mismo día que se celebra el consejo de guerra, con lo que se demuestra que ya estaban fijadas las penas”, rememoró Rodríguez Padilla. En la sala se prohibió la presencia de familiares o de ciudadanos almerienses. Solo acudieron militares y destacados miembros de Falange.  

A. Torres, Eusebio Rodríguez y Pepe Montes en la intervención sobre Encarnita Magaña y el Parte Inglés, en la sede la UNED. FOTO ARSENIO GUTIÉRREZ

Fusilada el 11 de agosto de 1942. “Al día siguiente de la ejecución”, precisó Eusebio, “aprovechando la noche, Fernando Rodríguez Ramos, uno de los simpatizantes de la acción de Encarna Magaña, depositó un ramo de flores en su tumba y como consecuencia fue procesado y condenado a pasar seis años de prisión años en la cárcel que suponía una condena a muerte si no tenías un familiar o amigo que te llevase alimentos”. Magaña, hija del jornalero José Magaña Rosa y Dolores Gómez Soriano, ama de casa. Desde los dos años, quedo huérfana, tras morir su padre en un accidente laboral en 1922. Cuatro años después perdió a su madre en Almería, donde se habían trasladado para trabajar en una trapería. Fue adoptada entonces por Rafael García Montesinos y Epifanía Córdoba Tortosa, que les dieron sus apellidos y la cuidaron. Estudió hasta secundaria y pronto destacó por sus inquietudes políticas e intelectuales. El pleno municipal de Tabernas, presido por el alcalde José Díaz, aprobó por mayoría en 2020 dar el nombre de “Calle Encarnación Magaña” para honrar su figura y compromiso con la libertad. Fue la primera mujer que forma parte del callejero a petición de los alumnos del IES Manuel de Góngora de Tabernas.

El pionero en recordar la memoria de Magaña en Almería fue el periodista José Miguel Naveros, padre de Miguel, añorado periodista de La Voz de Almería y exdirector del Instituto de Estudios Almerienses. Después llegaron decenas de trabajos y hasta el propio investigador Eusebio Rodríguez confesó el pasado martes, junto a Pepe Montes y el autor de esta información, que Naveros hijo le inoculó el ansia por encontrar la causa. Hay que destacar las publicaciones de los profesores Fernando Martínez (Jaén, 1966) y Sofía Rodríguez López, natural de Alhama de Almería, quien afirma que Encarnita Magaña representa el símbolo de la resistencia antifranquista en Almería. 

En el acto intervinieron la sobrina nieta de Encarnita Magaña que lleva su nombre, desde Formentera, porque su padre era el hermano mayor la represaliada joven de Tabernas. También aportó datos otro familiar de Encarnita Magaña como Karina, Carmen Álvarez González, que desvelaron datos escalofriantes sobre la represión en Almería.