Las denuncias que pone Rocío Flores se vuelven contra ella

Nuria Torrente

@opinionalmeria

Rocío Flores, hija de Antonio David Flores y Rocío Carrasco, no tiene suerte con las demandas o denuncias judiciales que interpone. Lleva prácticamente toda su vida amenazando a todo el mundo con una denuncia si se decía algo que ella consideraba que no era agradable a sus oídos. Desconozco si ha ganado algún juicio –parece que no-, pero ya ha perdido unos cuantos. Perdió contrata Vanitatis y el penúltimo fue la denuncia que interpuso en lugar de su padre contra María Patiño por una información que ésta dio en Socialité sobre unos carteles que, según denunció, habían aparecido en Málaga con la palabra “maltratador”. Rocío Flores y su padre entendían que era querellable una información errónea, y, claro, la justicia no les hizo caso, entre otras razones, porque la denuncia errónea fue subsanada por la propia María Patiño en el mismo programa.

Rocío Flores, en un programa de Telecinco / Mediaset

La última denuncia –si es que realmente es la última, que no se sabe- ha sido contra Kiko Hernández y nuevamente ha recibido un varapalo de la justicia, que ha fallado que la joven debe hacer frente a las costas del juicio, unos 30.000 euros. O sea, la denuncia se ha vuelto en su contra. Y, desgraciadamente, no es la primera vez. Una querella criminal debe estar motivada por algo muy serio y la utilización de una expresión inadecuada no es motivo para meter a nadie en la cárcel.

Los hechos de esta denuncia se remontan a 2021, a raíz del despido de su padre de Mediaset. En diciembre de aquel año Antonio David Flores cargó duramente contra Kiko Hernández en su canal de YouTube, en el que le acusaba de “humillar, denigrar y acosar” a las mujeres. En respuesta, Kiko subió un vídeo en su cuenta de Instagram en el que mostraba su buena relación con Rocío Carrasco, y manifestaba que era una suerte conocerla y entender con ella “el sufrimiento de una madre que vivió, según su relato, violencia vicaria por el innombrable”. Y añadía, sin mencionar de manera directa ni a Antonio David Flores ni a Rocío Flores: “Innombrable, somos afortunados de que ya no formes parte de nuestras vidas, ni de nuestra profesión. Cuando puedas, explícale a la pegamadres la infancia tan jodida que le has regalado para el resto de su vida… si tienes vergüenza”.

Rocío Flores denunció a Kiko Hernández, para el que pedía su entrada en prisión durante dos años y medio y una indemnización de 120.000 euros. Esta cantidad nunca fue depositada en los juzgados, pese a la reiterada petición judicial de la denunciante, porque el colaborador de Ni que fuéramos Shhh pudo demostrar su solvencia económica para afrontar una posible futura condena. “Y hoy el juez me ha dado la razón y quedo absuelto de toda la denuncia que me ha puesto esta señora. Estoy absuelto y usted ahora tiene que pagar las costas”, ha informado Kiko, que ha aclarado: “Por cierto, el término pegamadres es genérico, según recoge la sentencia”.

Rocío Flores tiene la opción de recurrir esta sentencia a instancias superiores. Según ha explicado Javi Oliveira en su portal Telesalseo, poca consistencia en la denuncia y, por tanto, es muy difícil que prospere. "Según tengo entendido, en casos como éste es mejor ir por la civil y no por lo criminal". El mismo Oliveira es el que ha calculado en 30.000 euros las costas a las que la joven tiene que hacer frente. La presentación de un nuevo recurso puede tener un nuevo agravante para Rocío Flores: que sea condenada nuevamente a costas.