¿Qué interés tiene Telecinco en revivir
los desencuentros de la familia Mohedano? Solo puede haber una explicación: la
audiencia, que en los últimos tiempos no es que le sobre, excepción hecha de Supervivientes. Tras la emisión del
documental Rocío, contar la verdad para
seguir viva, la cadena de Mediaset envió a sus productores una relación de
personas que no debían aparecer en pantalla bajo ningún concepto. Quería de esa
manera situarse al margen de una controversia en la que se mezclaban asuntos de
discrepancia familiar, principalmente motivada por el reparto de la herencia de
Rocío Jurado, con presuntos malos tratos y el ejercicio de violencia
vicaria.
![]() |
Kiko Jiménez contesta a Gloria Camila en 'Fiesta' / Mediaset |
Telecinco ha vuelto a dar rienda suelta
a esos personajes y ha levantado el veto no solo a su presencia en programas de
la cadena, sino también a los temas a tratar. Rocío Carrasco, como siempre,
puede ser la gran damnificada de esta nueva etapa.
El nuevo periodo de comparecencias -cual
si fuera una comisión de investigación parlamentaria- se abrió con Rosa Benito,
que salió en pantalla con el aval de haber ganado una vez Supervivientes. La exmujer
de Amador Mohedano fue recatada en sus exposiciones y se negó a echar más leña
al fuego con las malas relaciones actuales de la expareja. Tampoco se refirió
para nada a la hija de La Más Grande.
El siguiente del clan en aparecer en
pantalla (siempre en ¡De Viernes!) fue
Amador Mohedano. El hermano de Rocío anda un poco escaso de cash y algo tenía que decir el señor para ver si lo
llamaban en alguna otra ocasión. Para desagrado de Rosa Benito habló largo y
tendido sobre ella, pero el asunto estrella de él es su sobrina Rocío. En vista
de que el programa se acababa sin que ningún colaborador le preguntara de ella,
fue él mismo el que invitó a tratar el asunto: “Como en este programa no se puede
hablar de ciertas personas…”, dejó caer como quien no quiere la cosa. Obviamente,
le respondieron que no hay limitación alguna a la temática, y ahí fue cuando se
explayó. Se explayó tanto, que repitió la misma cantinela de siempre, o sea,
que Rocío Carrasco es mala a rabiar y él es un tío ejemplar, adorado por sus "alazanes" (¿ala qué, preguntaban en el programa). No dejó ambiente
de repetición de comparecencia.
Este viernes ha pasado por el programa
el tercer miembro del clan: Gloria Camila Ortega, que hablaría -eso decía la
promo del programa- “de todo y de TODOS sus hermanos”, resaltando la cadena el adjetivo
TODOS. TODOS, lógicamente, es Rocío Carrasco. La hija menor de Rocío Jurado
repitió sobre su hermana lo que tantos años lleva diciendo: que no es una buena
hermana, al contrario que ella, es que un angelito. Como el asunto estrella
daba para poco, la joven metió en el saco de sus críticas al que un día fue su
novio, Kiko Jiménez, y a la que un día fue mujer de su padre, Ana María Aldón.
A ambos los puso a parir. La cadena ha concedido el derecho de réplica tanto a
uno como a otra, si bien es cierto que en programa distinto.
Aunque la audiencia no le fue favorable, ¡De Viernes! ya amenaza con volver esta semana con Gloria Camila. ¿Qué contará que no haya contado ya? Y, sobre todo, tras Gloria, ¿quién será el siguiente del clan en aparecer en pantalla? Atentos estamos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario